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178 Capítulo III — Fraternidades E l confesonario y el culto han sido motivo de mimo por parte de los superiores y súbditos que han pasado por esta casa. Pero no debe olvidarse que aquí se han formado generaciones de sacerdotes, primero en los años de estudio y luego en los de elocuencia, que después se han hecho o ír por el mundo. Ha repercutido muy positivamente en los pueblos de la merin- dad, donde el trabajo continuo ha sido, mientras se ha podido, la asistencia a los párrocos, predicación de las festividades más importantes y dar ocasión a todos para cum plir los deberes de la iglesia. Entre la predicación de viva voz de nuestros sacerdotes y la del ejemplo de nuestros hermanos limosneros, las vocaciones se han dado en gran can­ tidad: cerca de un centenar. Siempre ha tenido Estella un plantel de pre­ dicadores, dedicados a tareas fuertes de gran predicación: ejercicios y misiones populares. En el mes de agosto de 1950, del 2 al 6 , tuvo lugar la asamblea de predicadores sobre el tema de los ejercicios; 28 sacerdotes dirigidos por el hoy arzobispo de Santiago de Compostela, Mons. Angel Suquía. Des­ pués se editaría en nuestra imprenta de Pamplona un folleto: «C u rsillo sacerdotal sobre los ejercicios espirituales». Esto hace ver un poco el interés que siempre ha habido por la formación de nuestros predicadores. Se debe anotar que los religiosos de esta fraternidad atienden a varias comunidades de religiosas, como confesores ordinarios. En cuanto a la vida interna de la comunidad, se podría decir que siem­ pre ha sido una comunidad recogida y religiosa, cumplidora de su deber. Es una fraternidad en la que predominan los ancianos. Y en la medida de sus posibilidades se van incorporando a las nuevas formas y estilo de vida. No hay lugar a los extremismos. Camina en una fecunda línea media. Es una fraternidad bajo el signo de la paz, que trata de llevarla a las almas. Los capítulos locales se reúnen con regularidad y son compatibles con las reuniones del discretorio. No existe el secreto y se procura trabajar unidos. Todas las cuestiones relacionadas con la provincia o con la frater­ nidad se ventilan en común. 3. La vida interna de la comunidad