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Ansoáin 169 se formó la primera fraternidad, el P. José Luis O rella llevó a su cargo, desde el convento de San Sebastián, la recién inaugurada capilla. Tam­ bién cabría dejar constancia, como algo llamativo, la salida del P. M iguel Angel Lizarraga, al tener que hu ir de la policía por las huelgas provocadas en la fábrica en la que él trabajaba. I I I . A n so a in La idea de formar esta pequeña fraternidad nació como una respuesta a un barrio que crecía muy rápidamente. Ya en septiembre de 19 71, la comunidad de capuchinos de extramuros pensó proyectarse de una manera especial sobre dicho barrio. No se creyó oportuno, en un princip io , in iciar la pastoral con un culto tradicional. Después de realizar un estudio sociológico y vistas las características peculiares del nuevo núcleo de población, se implantó el precatecumenado a fin de formar, mas adelante, una comunidad de base. Por otra parte, era un momento muy interesante para quienes llega­ ban de otras parroquias a un ambiente nuevo y que no acababan de enro­ larse en la parroquia de San Pedro. Se podría contar con ellos, pensamos, para una pastoral nueva. La falta de cultura, analfabetismo, en un por­ centaje grande, trae como consecuencia lógica el descuido de los niños y de los jóvenes. Si se tiene en cuenta que la economía de todos es débil y se hallan en aprietos pagando el piso, otras preocupaciones y responsabi­ lidades les vienen grandes. 1. Situación jurídica Después de un tiempo de experiencia, se vio la necesidad de tener un lugar de culto y de reunión. D iversas gestiones con el consejo de pas­ toral de la diócesis y con la curia arzobispal fructificaron en la compra de