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Problemas principales del cambio 145 En el mismo estudio se pretende iluminar la estima que los religiosos tienen de la vocación capuchina preguntándoles cuál es la postura que les parece predominar entre los religiosos respecto a la vocación. Las respues­ tas son: 4 % entusiasmos; 49 % conformidad; 47 % ir tirando o de­ sengaño. Los resultados del estudio de Schetini, sobre la base de la consulta general de 1971, coinciden fundamentalmente con los anteriores: el 47,9 % declara encontrarse contento en la orden, aunque existan aspectos que no le agraden; el 18,1 % debe hacer un esfuerzo notable para aceptar la orden; el 14,8 % se siente muy a disgusto; el 1,4 % se sitúa fuera de la misma. Parece surgir aquí, concluye Schetini, un factor que se encuentra en el trasfondo de todo el contenido de Navarra-Cantabria-Aragón. A los reli­ giosos les falta una identidad clara, característica, dinámica. No saben íntimamente qué son. Se comprende la grave importancia que esto reviste. 3. La fraternidad Tanto los estudios del P. Sarriés como el de la consulta general y, por tanto, el de Schetini, dan una importancia grande al capítulo de la fraternidad. Según el estudio de Schetini el juicio sobre la experiencia vivida en el interior de las fraternidades estructuradas según el modelo tradicional es abiertamente positivo, en todos los matices explorados por la consulta general (pregunta 24). El 69 % está satisfecho por la vida espiritual que allí se puede vivir; el 61,6 % por la vida de oración; el 75,9 % por la actividad de trabajo; el 76,4 % por la cooperación que la fraternidad ofre­ ce al desarrollo de la personalidad de cada uno y el 64,4 % por la propia vida afectiva. Este juicio positivo, sigue el estudio de Schetini, no se modifica ni si­ quiera cuando la pregunta propone a examen el ejercicio de la autoridad en la fraternidad. Se ve que los superiores se inspiran en el evangelio al ejercer la autoridad (65,3 % ), están empeñados en comprender los proble­ mas de cada uno (74,4 %), dispuestos a permitir las iniciativas (78,4 %), in­ cluso a estimularlas (55,9 % ).

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