BCCCAP00000000000000000000141
HISTORIA DE LOS CONVENTOS CAPUCHINOS El 11 de abril de 1897 el P. Francisco de Benamejí enfermó de pul monía y tres días más tarde de fiebres tifoideas muriendo el 24 del mismo mes. Fue religioso de exquisita caridad y “amante siempre de la santa pobreza...”. “El día de su entierro -escribe el cronista- fue verdaderamente de luto para Granada, y una manifestación de res peto y veneración con que miraban a los capuchinos las personas más distinguidas...”. Ese mismo día la Alcaldía concedió la propiedad de 8 metros cuadrados de terreno para su sepultura, y la de los demás religiosos capuchinos, en el tercer patio del cementerio de la ciudad. Concesión aprobada después en Sesión del 7 de mayo de 1897. Y el 13 de mayo del mismo año se hace el contrato o compromiso firmado de escritura para la adquisición del antiguo convento, com prado a la familia de los Sres. Barajas, por la cantidad de veinticinco mil pesetas, a pagar en cinco plazos, el primer plazo de doce mil quinientas entregado en el acto de hacer la escritura y los cuatro plazos restantes pagando diez mil reales cada semestre. El 1 de junio de 1897 “quedó otorgada la escritura a favor de nuestro síndico D. Nicolás de Montes y Moreno, rebajándose el importe hasta quedar en 23.500 ptas.” En agosto de 1897 se empiezan las obras en el viejo convento, pasán dose a él los religiosos, instalándose provisionalmente una capilla en el refectorio, entregándose S. Juan de Letrán a D. Mariano Maeso y Bermejo, cura de Alhama, y ante notario eclesiástico. Oficialmente y en reunión del P. Provincial, Ambrosio de Valencina, con su definitorio, tenida en Orihuela el 5 de agosto de 1897, se deja en manos del Provincial el nombramiento de Presidente de la Resi dencia de Granada. En reunión oficial, tenida en Orihuela el 1 de agosto de 1898, se establece canónicamente la comunidad de Granada con el curso de moral, nombrando superior interinamente y hasta el próximo capítulo provincial al P. Luis de Aranjuez y Vicario, lector de moral y primer discreto al P. Ildefonso de Cuenca.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz