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1“ CENTENARIO DE LA RESTAURACIÓN DE LA PROVINCIA CAPUCHINA DE ANDALUCÍA (1898-1999) También en el convento se atendían los cultos mensuales de la Divina Pastora, de la Orden Tercera, así como los cultos diarios de la iglesia conventual, el confesionario, ayudas a otras parroquias de la ciudad y de pueblos cercanos y un buen número de capellanías de religiosas. Toda esta actividad ministerial, en casa, queda reflejada en esta cróni­ ca que recoge el Boletín de la Provincia, del 23 abril 1955, p. 27: “Asociaciones y cultos. Además de la V. O. Tercera con 4 35 tercia­ rios, tenemos establecidos el Redil Eucarístico de la Divina Pastora que se compone de unas 3 0 0 asociadas, y la Archicofradía del Cordón Seráfico. Muy eficaces se han demostrado las devotas urnas o capilli- tas para la visita domiciliaria, de las que hay 8 de la Divina Pastora, 3 de San Francisco y 2 del Beato Diego J. de Cádiz. Cada año se predica en esta iglesia, la novena de la Divina Pastora, a la que se procura dar el mayor realce; un solemne quinario a Ntro. Seráfico Padre, y los triduos del Simo. Cristo del Perdón, el Bto. Diego y la Porciúncula. Puede considerarse tradicional la celebración de la Vir­ gen del Pilar, con la asistencia de los Cuerpos de Correos y Telégrafos, y de la Guardia Civil. En la capellanía de la iglesia de Madre de Dios, nos encargan desde hace muchos años los triduos al Stmo. Cristo de Limpias y Ntra. Sra. de la Medalla Milagrosa; e igual sucede con los panegíricos de costumbre en la 'de las Clarisas de Belén. Ministerios. Atendemos cuatro capellanías en sentido estricto, a saber: Las Tercianas Franciscanas (la Victoria), las Filipensas, Agustinas y Siervos deJesús; las dos primeras tienen colegios de clases numerosas. Se dice misa en la cárcel los días de precepto y se adoctrina a los reclusos para el cumplimiento pascual. Servimos mucho tiempo la parroquia de Cauche y desde hace seis meses se celebra misa vespertina en la finca ‘El Huerto ’, con afluencia de trabajadores del campo. También asistimos espiritualmente a la Adoración Nocturna de Cam­ pillos. Por último, se han repartido este año comidas a cien pobres. No obstante que las clases del Seminario Seráfico ocupa a las dos terceras partes de los Padres, es buena la labor de confesionario, en casa y en las capellanías, sin descuidar el apostolado de los enfermos”.

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