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P. FELIPE DE HIJAR Otro de los Misioneros Capuchinos que murió como ei anterior, envenenado por los indios, fué el venerable Padre Felipe de Híjar, uno de los más beneméritos que tuvo la pro­ vincia de Aragón, pues permaneció durante muchos años en las Misiones, sufriendo y sobrellevando con admirable forta­ leza grandes trabajos por extender el reino de Cristo tanto en Africa corno en América. Abrasado del celo por la salvación de las almas, partió de Cádiz para el reino del Benin, vecino del Congo, el día 1 de Febrero del año 1651, en compañía de otr'os religiosos que for­ maban la expedición, como ya se dijo en la biografía del Her­ mano Gaspar de Sos. Esta expedición se organizó por mandato del Papa Ino­ cencio X, a quien habían manifestado los Misioneros del Congo ios deseos del Rey del Benin, para que se enviasen también Misioneros capuchinos a este último Reino, a fin de que tu­ vieran conocimiento de la Religión Católica y la abrazasen. Para que se vean las peripecias de este viaje, así como los muchos trabajos, sufrimientos y peligros a que estuvo su­ jeto nuestro P. Híjar, así como sus restantes compañeros, tras­ ladamos aquí las noticias que nos da el P. Anguiano en la vida de Fr'. Francisco de Pamplona; dice así: “ El año 1647 vinieron a Roma por Embajadores del Rey del Congo, a dar al Sumo Pontífice la obediencia en su nombre, los PP. Fr'ay Juan Francisco Romano y Fr. Angel de Valencia, y después de haber cumplido con su legacía y dado noticia de los pro­ yectos de la Misión del /Congo, que entró en él dos años antes, y la vez primera, esto es, en el de 1645, ordenó la Santidad de Inocencio X, con consulta de la Sagrada Congregación de Pro— 301 —