BCCCAP00000000000000000000139

CINCUENTA AÑOS DE VIDA 93 El solar indicado era el contiguo del “ Hotel Regina” , propiedad del se­ ñor Loidi; pero a pesar de la intervención de su pariente don José An­ tonio Zulaica, no era posible llegar a un acuerdo. En el Capítulo Provincial de 1926 entró como superior el M. R. Pa­ dre Ladislao de Yábar, sustituyendo al Rdmo. P. Pascual de Pamplona, que lo había sido hasta entonces. El don de gentes del P. Ladislao y su tesón proverbial habría de ponerse a prueba en aquellos años turbu­ lentos, hasta llegar al éxito más’ completo a través de decisiones suma­ mente arriesgadas. Pocos días antes de terminar su primer trienio, el 9 de julio de 1930, lograba ver firmado el contrato de venta del “ Hotel Regina” , avi­ niéndose al precio y a las condiciones nada ventajosas impuestas por al señor Loidi: 650.000 pesetas pagaderas al contado en un solo plazo. Ob túvose de la Caja de Ahorros de Guipúzcoa un préstamo en hipoteca, que debía amortizarse en diez anualidades. Nombrado superior para un nuevo trienio, el P. Ladislao puso sin tardanza manos a la obra; el 9 de agosto eran aprobados por el Defini- torio los planos levantados por el arquitecto señor Gurruchaga. En vista de las dificultades que ofrecía la mano de obra a causa de las constantes huelgas, se encomendó el derribo del edificio a seis Hermanos, quienes en poco tiempo dejaban desmantelada la casa. Entre tanto el P. Guardián no dejaba piedra por mover para alle­ gar recursos y obtener exenciones de impuestos a título de la escuela gratuita que se planeaba; también esta vez-respondió satisfactoriamente la generosidad guipuzcoana y pudieron comenzar normalmente las amor tizaciones en la Caja de Ahorros, al mismo tiempo que se iniciaban las obráis. Los constructores Mendizábal y compañía se comprometieron a teríninar la iglesia en seis meses y medio. Pero los acontecimientos ven­ drían a comprometer seriamente lo comenzado. La proclamación de la República el 14 de abril y la quema de con­ ventos del 10 de mayo de 1931 hizo aplazar la ejecución de las obras hasta que se despejara la situación. El 25 de noviembre se reanudaban con un optimismo a toda prueba y el 10 de julio de 1932 podía inaugu­ rarse el primer tramo de la iglesia para destinarlo al culto; una nota de tristeza nublaba, con todo, la alegría del éxito •. el día 30 de junio habíase desplomado desde los pisos superiores al suelo de la iglesia el R. P. Francisco de Elizondo, que dejaba de existir cuatro días después Habiendo sido elegido Definidor General el entonces Ministro Pro­ vincia], Rvdmo. P. Carmelo de Iturgoyen, fué nombrado para sustituirle en el gobierno de la Provincia el P. Ladislao; en su lugar fué designado Guardián de San Sebastián el R. P. José María de Oyarzun en la misma fecha de la inauguración de la primera parte de la iglesia. Continuaron las obras con rapidez y sin interrumpir ni un solo día los cultos; el 10 de febrero de 1933, víspera de la fiesta de nuestra Señora de Lourdes, el M. R. P. Ladislao, ahora Provincial, tenia la satisfacción de bendecir el templo ya terminado; los fieles podían pasar por la hermosísima gru

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz