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CULTURA DEL PUEBLO MOTILON 55 el punto de inserción de la caña con la macana hay así– mismo una fuerte envoltura de hilo, de fibras de agave. Al presen te están introduciendo los motilones fle– chas con la extremidad superior metálica, en forma de lanza v con los bordes afilados . Dicho metal no lo ela– boran ·los motilones sino que lo utilizan y transforman de machetes inservibles y de otra chatarra. De mucho uso en la caza es el arpón, típica arma de los pueblos primitivos. Consta de dos partes fun– damentales: la caña y la macana, que poseen casi las mismas características que las anteriormente descritas. La particularidad reside en que ambos componentes no están fijos o asegurados resistentemente uno con otro, s1110 que el hilo que los une es desenrollable, lo que acontene fácilmente cuando la parte afilada pene– tra el) la víctima. Al intentar ésta escaparse, queda en– redada entre las ramas o en los arbustos, siendo en– tonces fácil presa de la sagacidad instintiva del moti– lón. Para pescar emplean una especie de lanza, de vno. tres metros de largo, hecha totalmente de macana, muy bien elaborada y con la punta sumamente afilada. Posee el barí dos tipos ele arcos, ambos hechos ele macana. Unos son largos ( 2 m. poco más o menos), rectos, muy resistentes, con un promedio ele anchura ele 4 centímetros, de superficie lisa. En uno de los ex– tremos se anuda una cuerda de agave. Se le deja co– rrer hacia abajo y vuelve a anudarse en el extremo in– ferior . Por el lado opuesto se la anuda hacia la mitad, para venir luego a morir en el mismo extremo de don– de partió. Este arco se destina a la caza mayor y me– nor. Los arcos pequeños están hechos fundamentalmen– te eje los mismos materiales: ñ1acana y pita, aunque ésta a veces es sustituida por un bejuco amarillo que