BCCCAP000000000000000000000213

-5S- cle pri,·arse ele ocho Relig iosos . que tan necesa– rios les eran en una época en que los Capuchi – nos estaban cas i inici ando su restauración en España. después ele la infausta exclaustr<1cic'in del año 35. Bien persuadidos. pues . ele la nobl e y subli– me Misión que les habí a conducido a las hospi– talarias playas venezolanas. apenas ll egaron a Car acas, comenzaron a gestiona r "con g ran in– terés-dice el P . lVI elchor ele Escoriaza-( 1 ) el <1s1mto ele las Misiones ent r e los indígenas ele la Guaji r a o ele la Guayana. pero por circun stan– cias ach ·ersas no se pudo hace r nada práctico sobr e el particular''. E l año 1893 se r epiti eron las gestiones sob r e el mi smo asunto, pero cau– sas absolutamente independi entes ele la YOhm– tacl ele los Misioneros hi cieron ineficaces sus ge– nerosos esfuerzos. En 1894 se pudo conseguir que el Gobierno Nac ional. siempre inter esado por la r educción de los indígenas. publicase la sig uient e Ley ele Misi ones : ( ") . (1) Crú11ica cit., pág. 25 . (:!) Rcco¡,ilac ió11 de Leyes y Decretos de r·c11r:;11cla, t. XVII, pág. 11 9, Caracas, 1S96.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz