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P. ANTONIO. SAo-Lrn. Li. SAo-Lrx. L\TSÍ:". P. ANTOXW, L\Tsí:. P. :\NTO:'i!C. Lnsí:. LIFE!. Lcn-AN(;. Cl!A:'ifi. P. ANTO:'i!(I, CHAN,;. P. ANTONIO, C.HANG. P. AXTONI(). C11ANG, Tonos. P. ANTON!O. Lr. P. ANTONIO. Lrr,r,r. - IÚ Yú ib;;i jlOr el nw11lci y .,a\ih un niño clw;,Htin. rptr- parccÍ;1 1nt ángel. n1e dió 1.1n Cop{H1 con t·1 Santísimc,, Detrás h011zos y hombrt?;; m:1- lu, gritando, y yo entonces corría, corría, !levan– do a Jesús. Los hombres se iban acercanj11, pera _nl corría más, y p2día a Jesús <¡lle me.' ctymlara a salvar la Eucaristía.. --- Y entonces, ¿ qué sucedió? -1\Ie desperté, y 110 sé más. j Cy, qué miedo te daría! ¡ Qué ya! ¿ Ko ves que ll{'vaba a Jesús? ·- -Pa¡lre, ¿ ln, sueños son verdad? ---Los suciios son siempre sueños. -Pero, ¿p11ctkn ser verrlad? ~i Dios quiere, clan, r¡nc .sí. Ya sabéis cómo a ~an José Dios le :1ahló en sucfíns, y otras veces, por obra de l)ic,s, e.e cPnvirtierun en realidad. Así, pues, algunas veces, pueden ser verdad. -Anda, Li, que te come un pez gurdo... (Li s,· 11s11sia, :Y se ríen !udos). --; Ahí va, Lotang, la nariz que vas a tener! (Lo– tang reacciona tirando otro cogota.co a Lifei). ¡Ay! 1Risas de los otros). -j ~..íejor ! Y vosotros os qm:dáis sin la vu"slra. ---Padre... ; ahora que me acuerdo! ¿ Cuándo nos yas a contar aquel c:1e:1to tan bonito que nos pro– metiste ayn ' --¿Cuál? -El del niño que nmno por rlefrnder la Euc:iristía. -¿ El de San Tarskin? ----Sí. --~o es cuento; es historia. -P-!1es lo que sea. --Cuéntalo. Padre, cuéntalo. -Bueno. Pues, furmalitos. 1 Se sic11ta,i for:uando .,1n1Jw;. Era hac muchos años, allá, en la ciudad de Roma. aunque había muchos cristia- nos, eran mucho numerosos los pagano:;, - ¿ Como en China ?. --Sí. Los paganos odiaban a muerte a los cristia- nos, y entonces t:l Emperador publicó un edicto en el que se ordenaba... (al •uer que a/91111,-., se restregan las manos). ¿ Qué, Lifei, tienes f: io: -¡ Quift ! Ya me ha calentarlo hicn Lotang-.