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256 i\IANUAL DE HISTORIA FRANCISCAé'/A rigurosamente a los lectores expresar opiniones <, menos proba– bles. laxas y peligrosas¡), Esta imposición, sin embargo, duró poco tiempo. La única posición doctrinal que agrupó en un frente cerrado a todos los hijos de San Francisco fué la defenf'a de la Inmacu– lada Concepción. La tesis franciscana. aceptada implícitamente en el Concilio de Trento y apoyada por los henedictinns y je– suítas. halló eco universal en el sentir de todo el pueblo cristiano y fué avanzando. sohre todo en el siglo XVII, merced n lns con– tinuns gestiones diplomúticas de los reyes de Espaiía. hasta quedar madura para la definición <logmútica. Uno tras otro. los docu– mentos pontificios fueron reduciendo al silencio la opinión con– traria y acentuando el triunfo de los defensores. Paulo V renovú en 1616 las condenaciones lanzadas anteriormente por Sixln IV y Pío V contra lus que impugnaran en público la Concepcii',n Inmaculada; Gregorio XV fup más lejos en 1622, prohiliiend0 manifestarse en contra de esta doctrina aun en privado; Alejan– dro V JI, con su constitución Sollicitudo, que cornnú lo,; e~fuerzos de Felipe IV y de los franciscanos, dejó la tesis concepcionista a punto de definición; Inocencio XJ, a petición de Carlos IL ex– tendió a toda la Iglesia, con carácter obligatorio, el oficio y la octava de la Inmaculada; Clemente XI la declaró fiesta de pre– cepto en 1708. Ya no había sino esperar a que el magisterio infa– lible rubricara lo que la Iglesia universal aceptaba como yerdad revelada, y este paso lo daría en Hl54, el Papa terciario Pío IX. ESCRITORES DE MAYOR RELIEVE. El prestigio teológico de que gozaba la Observancia en el siglo XVI púsose de manifiesto en el Concilio de Trento, en cuyas sesiones estuvo representada por diez teólogos oficiales y un cre– cido número de obispos y consultores, 57 en total. Los más ilus– tres fueron Alfonso de Castro ( t 1568), enviado al Concilio por Carlos V; Andrés de Vega ( t 1560), cuya doctrina de la j ustifi– cación quedó fijada en el decreto correspondiente del Concilio;

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