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LA PRCEHA DE ESCUDERO 37 Francisco tornó a echarlo a broma y advirtió (13): "Es que no sabéis por qué e~toy tan alegre: un día seré venerado por todo el mtmdo". Y ele nuevo brotó de sus labios la risa. De esta manera ejerció un influjo bienhechor sobre sus camaradas. Semejábase en medio de la mazmorra. al sol que derrama alegría y calor. A todos ;mimaba. Ahogaba sns <1ucrcllas y desavenencias. Con particular amor se desveló por 1111 caballero cautivo, al que todos esquivaban por su carácter orgulloso e insoportable. Sólo Francisco le hacía compañía. Con paciencia imperturbable sufría su mala índole. Poco a poco le fué corrigiendo sus defectos y le reconcilió con sus colegas (14). Tocio es caballeresco en este escudero: caballeresco su paso honroso por su ciudad natal; caballeresco su buen humor, su "gaya ciencia" en medio de los tormentos ele la cárcel ; caballeresca su absoluta con– fianza en grandes \azañas posteriores y veneración en el mundo; caba– lleresco su comportamiento con los compañeros ele cautiverio y en especial su mansedumbre y magnanimidad con aquel individuo odioso. Hidalgo a carta cabal. sólo lr falta recibir el espaldarazo para entrar en el estado ele caballero. (r3) Los Tres Socii, .¡, clicc11: ·· "\dime adorabc1r per totum mumlum ", y en cambio, Ce/. II, 4: "Adhuc .rn11cl11s adora!Jor per s;eculum totum ". - Segura– mente que Tomás de Ce]aJJo ha añadido por ,m cuenta la palabra sanct11s. Es evidente que Francisco no pensaba entonces en harcr,e santo y menos en ser un ,lía honrado como santo: pero sí esperaha llegar a ser un gran príncipe, honrado por el mundo. (q) Ce!. II, 4: Socii. 4. (H_ ,\. C. ubi supra.)
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