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138 EL CABALLERO DE CRISTO FRAXCISCO DE ASÍS Y ahora se acercaba ya el término de su vida caballeresca. Era do.s años antes de su tránsito. Amenazado de ceguera completa y atormen– tado de indecibles dolores., luchaba una noche en fervorosa oración pi– diendo valor caballeresco hasta la muerte. Entonces percibió en su espíritu esta promesa del Emperador del cielo ( I I 5): '' Consuélate. hermano, y alégrate en tus enfermedades y tribulaciones; por lo de– más., estáte tan seguro y tranquilo como si ya poseyeras mi reino". ,\ la mañana siguiente su alma remontó el vuelo más alto que nunca y compuso la alabanza de las criaturas, exhortando y animando a todas a loar al Criador (u6). Y porque el sol es el más hennoso de todos los seres naturales y ha sido comparado con el mismo Dios (Mal., 4, 2), tituló su canto de cis– ne Cántico del hermano Sol (n7). Después enseñó a sus compañeros a "decir y cantar" la nueva laude. Además hizo venir a Fray Pacífico, el antiguo rey de los versos y excelente cantor, y le mandó que con otros frailes se fuera por todo el mundo predicando y cantando esa laude. Deseaba que el mejor predicador de ellos anunciara primero la palabra ele Dios y, acabado el sermón. todos juntos, como juglares del Señor cantasen el Cántico del Sol. Terminado el canto. el predica– dor debía decir al pueblo: ''Nosotros somos los juglares del Señor. v por toda recompensa os pedimos que hagáis verdadera penitencia". Y añadió: "¿ Qué otra cosa son los siervos de Dios sino sus juglares en– cargados ele conmover los corazones de los hombres e infundirles una santa alegría espiritual?" (n8). Poco después oyó que entre el Obispo y el podestá de Asís ;;e había suscitado una grave discordia. Con este motivo añadió a ;;u Cántico los versos que tratan del perdón y del amor de la paz, rogó a las partes contendientes que se juntaran en el palacio del Obispo é hizo cantar ante ellos el Cántico del Sol. Apenas había acabado et canto, el Obispo y el podesta se abrazaron y besaron y con lágrimas en los ojos hicieron la paz ( I I 9). Pocos días antes de su tránsito se enteró de que la hermana muer– te se aproximaba. Y dominado por una grande alegría de espíritu, (II5) Francisco con lenguaje auténticamente c:iballeresco c•Jl•JCa:)a siem– pre, hasta su muerte, al emperador al frente de b c:iballería y al Em:iera1for del cielo al frente de los Caballeros de Dios. (II6) Ce!. II, 213 (B. A. C., 512). - Cümpán:se S,hcc. ;1,crf., roo. (B. A. C., 765 siguiente.) (u7) Spec. perf., I 19. (B. A. C., 787.) (uS) Spec. perf., roo. (B. A. C., 766-757.) (II9) Spec. J•erf., IOI. (B. A. C., 767.)

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