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EL TROVADOR Y JUGLAR DE DIOS 131 Tn es patientia. Tu es securitas. Tu es quietas. Tu es gaudium et lcditia. Tu es iustitia et tenzperantia. Tn es omnis di1-itia ad s11fficien– [ tiam. Tu es pulchritudo. Tu es mansuetudo. Tn es protector. Tu es rnstos et defe.nsor. Tu es fortitudo. Tu es refrigeri11111. Tu es spes nostra. Tu es fides nostra. Tu es magna dulcedo nostra. Tn es vita «:terna nostra, nwrmus et admirabilis Dominus, De11s omnipotens, 111isericors Sah:ator. Tú eres pa-eiencia. Tú eres seguridad. Tú eres quietud. T,í, eres go:::o y alegría. Tú eres justicia y templan:::a. Tú eres toda nuestra riquc:::a a [ satisfacción. Tú eres hermosura. Tú eres 1nansed1t111bre. Tú eres protector. Tú eres custodio y defensor. Tú eres fortale:::a. Tú eres refrigerio. Tú eres nuestra espcran::::a. Tú eres fe nuestra. Tú eres gran dulcedumbre nues– [ tra. Tú eres 1 1 ida eterna nuestra, gran– de y admirable Señor, Dios om– nipotente, misericordioso Salva– dor (83). Francisco perseveró en la alabanza de Dios hasta la muerte. Cuando sus dolores · corporales llegaron a ser casi insoportables, su espíritu fué haciéndose más rendido a Dios, más unido con Dios, más alegre en Dios. En los últimos días no cesaba de cantar las alabanzas de Dios, invitando a los frailes a que hicieran lo mismo. Convidaba a ello támbién a las demás criaturas, haciendo cantar una y otra vez (83) Cltartula quam dcdit fratri Lcolli, Opuse., 124 sig. (B. A. C., 68-69). - La preciosa hoja, que contiene además la Bendición de San Francisco a Fray León, se guarda en un relicario del Sacro Convento de Asís. El texto ha su– frido algo, porque Fray León, según deseo del Santo, llevó consigo el pergamino durante toda su vicia (murió. en 1271). Fray León añadió esta advertencia: ''El bienaventurado Francisco, dos años antes ele su muerte, hizo una cuaresma en el lugar del Alvernia, en honor de la bienaventurada Virgen María y Madre ele Dios y ele San Miguel Arcángel, desde la fiesta ele la Asunción de Santa Ma– ría Virgen hasta la fiesta ele San Miguel ele septiembre; y se manifestó sobre él la mano del Señor con una visión y un coloquio seráfico y la impresión de las Llagas ele Cristo en su cuerpo; hizo estas laudes que están escritas al otro lacio de la hoja, y las escribió de su propia mano, ciando gracias a Dios del beneficio a él concedido." Cfr. Opuse., ed. LEMMENS, 198-200; BoEH~lER, A11alckten, LIX; y Cel. II, 49.