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-· $1) ilIISIONES• ,Dls LOS PP. _CAPUCHI.NOS garian .á los Prelados Ordinarios cuando la mayor parte de la población Juera cris_tiana, para que pe ellas se formaran Pat:roquias :regulares y entraran eu el gobierno uniforme de las Diócesis ya formadas. En .aten– ción á esto el Prefecto Capuchinp creyó desde un prin– cipio que algunas .de las estáciones comprendidas en su jurisdicción debían pasar á la jurisdicción del Obis.po de ;\ncud, Iltmo ..donJusto D.onoso, puesto que predominaba absol utamente el elenwnto cristiano ; así lo propuso con -el _noble intento de entregarse más de lleno á la evange– iización ,de los Jnfi.eles, internándose .en las tierras y. tri– bus de ellos; p~ro no contando el Prelado CotJ. número suficiente de sacerdo tes , que pudieran tomar desde luego la .cu.ra de aquellas almas, como Párrocos, suplicó al Pre– fecto retuvi era dichas misi ones, aunque _esto impidiera alg.ún tanto el fondar nuevas conversiones ó reducciones de indios . ..\sí se hace notar en las preciosas Memorias persona– les de los primeros misioneros Capuchinos que no.s sir– Yen de guía casi única en esta época de nuestra historia , . pues aquellos fervorosos apóstoles no se cuidaron mucho de archi,·ar y anotar cronológicamente sus tareas apos– tólicas sino sólo de trabajar, luchando con las serias dificultades de su sagrado ministerio. Al :iniciarlo en la Araucanía , los Padres se aco– modaro n al antiguo sistema establecido en este país, , de correrlas apostó!/ms )) en las épocas del año fa. vorables para ,·iajar, es decir, desde Oc tubr.e hasta ::\Iarzo. En estas excursi ones visitaban todos los indios cris– t ianos diseminados por el inmenso campo de sus respec– tivas misiones; administraban á los niños el Santo Bau-