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7.J; i\IrSIONES Dli;,. LOS 1'1i'. CAPUCHIN08 con insuperables dificultades para la debida e,·angeiiza – ción de los indios. III. Con.venio p1rnhulo eutre el Gobierno-1le- Chile y- ~a Or1len 111• l\len'lres Catrnchinos :\fas de un siglo antes de que los Capuchinos fueran llamados á las misiones de la Araucanía, un miembro be– nemérito de esta rama de la Orden Franciscana, había ·vi– sitado muchas de las colonias Hisp,mo-Americanas estu– diando los progresos· de la Fe cristiana y de la civiliza– ción en los países conquistados por Es1:>afía. El 2 9 de Abril del aiio I 7 r 1, · se embarcaba en Port Luis (l\lorbiham), el Rdo. P. Florentino de Bourges, mi– si-oner~ destinado á las Islas Madrás, hoy la India Ingle– sa; e1 citado puerto en la desembocadura del río Le-Bla– Yet e ra el punto casi obligado ·donde se hacían entonces ;-i_ la mar, cuantos se dirigían á las Indias Orientales. ( r ) Por los fragm entos de sus relaciones de viaje publica– dos en un opúsculo francés titulado • ChoL1:: de L ettrcs L'd //icantcs » se ,·é que dicho Padre desembarcó en Buenos Aires, obl is·ado quizá á tomar tal rumbo por percances de la mar: aprm·echóse de ellos para visitar los prin6pa– les cen tros de vicia religiosa y apostólica. De allí, pasando por Mencloza, tomó el camino de los _.é\ndes, cuya escarpada cordillera debió atravesar con in– creibl<~s trabajos , llegando en algunos días más á Santia- go ele Chil e. · En Santiago;dice él mismo, • fuí muy bien r ecibido por el Iltmo. seiior Obispo , (á la sazón don F rancisco de la :. l ; Vide .\n alecta Or(li ni s. :;\[. C. Yol. XX.[[, Pág8. 1-t~, Ti,' y :.!Hl: