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30 grata complacencia de hacer saber a V. S., para que se digne po– nerlo en conocimiento del Excmo . Sr. Presidente de la República, que después de haberme esforzado constantemente por la civiliza– ción de las infieles tribus de la Gua ji ra y Sierra Nevada, han lle– gado a esta ciudad tres misioneros Capuchinos con sus respectivos hermanos de la Orden . »Por la copia del decreto que le acompaño, verá V. S. que he establecido la Misión con residencia, por ahora, en la ciudad de Riohacha, de donde emprenderá sus trabajos apostólicos . »Juzgando que el Gobierno, que me ha auxiliado en la venida de aquellos RR. PP., no me esqu ivará su apoyo, tengo la firme esperanza de que la obra iniciada tomará mayor ensanche y produ– cirá grandes beneficios a Colombia . »Para el mejor gob ierno político de las tribus que se trata de evangelizar, yo me permitiré hacer a V. S. algunas indicaciones, de acuerdo con el artículo 518 de la ley 155 de 1887, de 24 de Agosto, que adiciona y reforma los Códigos Nacionales; la ley 61 de 1886, y la 57 de 1887. »Sabe V. S. que el Gobierno me auxilió con 1.800 pesos, en oro americano, para la venida de los RR . PP., cuya suma aun no se ha gastado toda. He tenido que hacer gastos de pasaje de los misioneros, de Madrid a esta ciudad, a la de Riohacha, y otros urgentes de necesidad . »Como V. S. comprenderá, han tra ído todo lo necesario para la Misión y uso propio de los RR. PP.; pero como el equipaje exce– día a la franquicia que la ley ha concedido, he tenido que pagar de derechos a la Aduana de este puerto la suma de 1.594-50 pesos . Estas consideraciones me obligan a suplicar a V. S. tenga la bon– dad de hacerlas presente al Excmo. Sr. Presidente de la República, para que se me devuelva la suma expresada de pesos 1.594-50. »Sírvase V. S. expresar mi agradecimiento al Supremo Jefe de la República por la cooperación que ha prestado en la obra, y sea V. S. el digno intérprete de mis sentimientos en fa vor de la paz y el progreso de la Nación.-Dios guarde a V. S. muchos años. -t José, Obispo de Santa Marta.-Santa Marta, 18 de enero de 1888». Hechos todos los preparativos, se hizo la primera excursión a Sierra Nevada , como diremos en el capítu lo sig uiente .

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