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:4 7.. -}\[AD~E La gracia y el pan de Belén con que Ia ..Pastoro. 1 alimenta a 1 sus dvefas, no sori bellos símbolos, s1no supremas ,realidades,. Es Mádre: esp:i.rittíal ! de todos nosotros. Su níate:til nidad divina alcanza 1 a:1a;pétso:ilá.Í éritera ·dél lsál:vf:i.: dar·: a Jesús y a 1 su:c'üerpo mistícb: Desde sU:ptiÍne– ra -concepción hastri. su Jjlenodésatrollo. En:•la EáL carnación, en el Calvario, en el Cielo. r La madre terrena h¡,fluye, 0 de tal suerte en la existencia del fruto de· sus entrañas, que, sin ma- dre; n.orsca:be 1 1:iiJo. ' Sin nuestra Madré espirítuar. no podemos llegár. a la vida dé'~a: gracia. , La ma·dre terrena suéle'vef con tristeza que· sti hijo se emancipa~ N lbSfpotfofa :áños püede vivir el nifi.o siii éT·iíiflujó máternal consta11te. · En Io•espfritual riunca·su'éna 0 1a·hota'de la emarit: cipación. Anteidíie:h, a 0 the<lii'da que ·cr-ééen las fuefL.