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.suavidad de las palabras y del canto de la Pastora. La esterilidad de la alfombra de nieve no in– quieta. Mientras se derrite, brinda ocasión para gustar pastos más sabrosos repartidos por las ma– nos de la Pastora. Tempestad son las pruebas que Dios te envía por medio de su Madre: la desolación, la desgracia, 1:;l amargor en el trato de las criaturas. Si amanecen cumbres brumosas, si te cerca la niebla, si se eclipsa la luz de lo alto y te deja su– mido en noche oscura, no temas. Las boiras más densas no le impiden a Ella ver a sus ovejas; ni los sollozos del cierzo, oír sus balidos. Por la fe palparás la presencia de la Pastora, más cercana a ti, más amorosa todavía que en las horas radiantes. 29.-PREDILECCIÓN A todas las ovejas redimieron el buen Pastor y su Madre. A todas las suyas contemplarán con amor infmito, a su mano derecha, al fin de los tiempos, cuando se cumplan los vaticinios: "Y se reunirán en su presencia todas las gentes, y separa– rá unas de otras, como el pastor separa las ovejas de los cabritos; y colocará las ovejas a su derecha y los cabritos a la izquierda" (1). "Yo juzgaré entre oveja y oveja, entre carneros y machos cabríos" (2). -47-

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