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m AUSENTOSE EL BUEN PASTOR 18.-LA HEREDERA Mientras permanezca la Pastora en la cumbre del collado, acompáñale a su Hijo. No se diga tam– bién por ti (1): "Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas". Antes de partirse de este mundo, el Señor dis– ;>one de su rebaño. Suyo; pues El se lo hizo, lo crió. Suyo; pues, cuando la grey andaba perdida, El .a rescató. lA quién legará tan costosa herencia? El buen Samaritano vendó las heridas del cami- 1ante sorprendido por los ladrones, y luego lo en– :omendó al cuidado del mesonero (2). Nosotros somos más afortunados. El buen Pas– ,0r nos pone en manos de su misma Madre. "Ahí tienes a tu hijo" (3): a todos tus hijos, a los 1ermanos del Cordero de Dios. Ahí tienes la grey . edimida por mi sangre y redimida por ti. Cuida le ella. -33-

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