BCCCAP000000000000000000000190

EL PROBLEMA DE LA SALVACION DE LOS INFIELES 99 mus incunctanter. g) El conocimiento de la fe sobrenatural y el deseo del bautismo pueden ser explícitos o implícitos, es decir. que sólo de un modo general desee cumplir en todo la voluntad de Dios y acomodarse a sus enseñanzas. Supuestos todos estos prenotandos, vamos a exponer las diversas soluciones que los teólogos han dado a la cuestión propuesta. 65. I. Primero se debe observar que todos los niños que mueren sin el bautismo. antes de llegar al uso de la razón, no podrán entrar en la bienaventuranza. Por otra parte. como no pueden tener pecados personales, tampoco la bondad de Dios puede condenarles al infierno; por esta causa afirman comunmente los teólogos que irán al limbo y obtendrán una felicidad de orden puramente natural. II. Todos los infieles adultos que positivamente re– chazan la fe, o que mueren con pecados mortales persona– les, se condenarán. III. Pero ¿qué será de los infieles negatiJJos, los cuales inculpablemente carecen de la fe sobrenatural y divina? ¿Se salvarán o condenarán? Su situación es verdaderamente comprometida, pero no desesperada. Vea– mos las opiniones más principales de los teólogos. Primera opinión.-Estío y Silvia, teólogos de la Uni– versidad de Douai, con algunos otros escritores, hacen de los infieles una masa de condenados. En síntesis, afirman que Dios estableció con voluntad antecedente los medios generales para la justificación y salvación; mas no los especiales inmediatamente aplicables a todos y cada uno de los hombres. (1). Esta sentencia es rigorista, contraria a la justicia de Dio;:; y a la redención de Cristo. No es conciliable con el axioma teológico que resume el pensamiento tradicional de la Iglesia en esta materia: Facienti quod est in se (1) Cf. C. CARMINATI, JI Problema Aiissionario, p. 622. Bcrgamo, (1925).

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz