BCCCAP000000000000000000000189

280 ACTIVIDADE.S APOSTÓLICAS menzaron a florecer y después dieron opirnos frutos. Por ia;:; .mismas razones que en San Juan, erigieron también aquí, en 1925, un Colegio Católico, con su magnífico edificio propio, iniciado por el P. Julián de Mondreguies y llevado a término en 1927 por el P. Santiago de Pinilla. También la fundación de Río Piedras data del 1905, aun cuando las obras pudieron inaugurarse solamente el año 1.908. Por iniciativa de los Padres smgió en 1928 el e,.;pléudido Cole– gio de San Antonio, émulo de la Academia Católica de San Juan; en los dos primeros años de su existencia desfilaron por sus aulas unos 1.000 alumnos. Como indicamos al principio de este párrafo, las tres rP– sidencias de Puerto Rico cesaron de pertenecer a la Provinciu de Castilla en 1929. 4. El P. Ce!Jrones planeó además el apostolado en la re– pública de Cuba, y en 1905 los primeros religiosos allí envi11 - dos fijaron su residencia en Bayamo, tomando a su cargo la Vicaría del mismo nombre, a la que pertenecían tres parro– quias, sin contar la de la capital. Era un campo inculto :v– abandonado, que los nuevos operarios evangélicos empezaron a abrir y desbrozar en mndio dP la indiferencia de los creyen– tes y de la hostilidad de los enemigos; a pesar de su celo y ah-– negación, por muchos años crecieron y se multiplicaron rrní:-; Jas espinas y los abrojos que las flores y los frutos. Convenci– dos de la capital importancia de eulti ,·ar con esmero la: niñez. idearon e implantaron en HH3 un c0legio de instrucción pri– maria; pero m·ancomunadas las fuerzas de los pmtestantes y masorws, impidieron inuy pronln su funcionamiento. No me·– jor suerle-aunque por diversas razones-cupo al segundo co– legio, inaugurado en 1017, y una teI'f•era iniciativa, de 192:-L fracasó también aJwnas un año después de empezada. Cruces fué la segunda ciudad cubana que nlojó a nuestros 1-eligiosos. Después de varias gestiones pudo realizarse el prn– yecto de una fundación en la Provincia de Santa Clara, tn– ma:ndo el año 1010 la parroquia, que se hallaba en Un estado lamentable material y espiritualmente. Los Padres, como en to– das partes, empezaron su abrumadora tarea en medio de enor– mes dificultades: relajación de costumbres. agravada por la

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz