BCCCAP000000000000000000000189

.206 LA \ ID.\ HE LA PRO\l:\'C!A (174G-1.S3(i; los demás Superiores locales; pero que en el caso contrario no se convocara. El Rey y su Gobierno no se contentaban con pedir insis– tentemente misioneros, sino que se entrometían en el régime~ interno del Colegio. El 20 de julio de 1793 el Consejo de Indias presentó las constituciones por que debía regirse, e impresas, se enviaron a todos los conventos (13). Para el nombramiento del Prefect0 se necesitaba siempre la aprobadón del Gobie1·– no (14). Con el doble fin de reforzar el petsonal de los operarios evangélicos en la isla de Cuba y facilitar la vida a los nume– rosos relig10sos que a causa de la supresión napoleónica se refugiaron en los conventos de Andalucía, el P. Francisco de Solchaga obtuvo del Gobierno nacional permiso para enviar una expedición, compuesta de dieciséis misioneros, que se hi• cieron a la vela en mayo de 1810 (15). Y así, durante los tur– bulentos dtas del siglo XIX pudieron vivir en la perla: de las Antillas con relativa tranquilidad algunos Capuchinos caste– llanos, desde donde extendieron de·spués su apostolado a las repúblicas sudamericanas. 5. A petición del P. Nicolás de Bustillo, Definidor general de la Orden, Pío VI expidió, el 5 de julio de 1785, el breve Ad ea per quae, Pn Yirtud del cual se concede a los Capuchinos, en los dominios de América sujetos al Rey de España, "la facul– tad de erigir y establecer, fundar y bendecir los Víacrucis en los parajes, sitios. ciudades, villas y lugares en donde no los hubiere de la Orden de San. Francisco, llamados de la Obser– vancia". El P. Adrián dP Estavillo. Procurador de Castilla, pre– sentó el breve al Comisario apostólico general de la Santa Cruza.da para el pase, que le fué concedido el 27 de julio del (13) Viridario auténtico, p. 650, 655. De estas consfüuciones hemos visto otra edición bajo el título Reglamento y ordenaciones dispuestas poi· los PP. Ca})uchinos ele Castilla para el seminario de m'lsionrs de la Habana, Habana, 1855. (14) En enero de 1793 rl Consejo de Indias pasú .iviso .il Provincial para que se encargaran los Superiores de nombrar el nuevo Prefecto; el año 1799 se hizo otrn elección, pero el Consejo no aceptó el candidato pre– srnt.ido. Cf. 1-'iriclario auténtico. p. 645, 688. (15) Cf. Viridai•io auténtico, p. 739. Entre los misioneros fueron algu– JJOS coristas que terminaron sus estudios en la Isla.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz