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l'O\'\'E\"fü JlE \'I'sA lJEL :\L\R Se comisionó .1 P. José ele Legarda, Cura y Yicario ele la l'a– rroquia ele V illa Moderna o al Sr. Presbítero D. Martín Rucker S .. q ue clespués fué Obispo de Chillán (-!- en 193-1-) , para qu e fijaran h primera piedra ele la iglesia parroquial, declicúnclose a S. Miguel Arcúngel, clebiaenclo le\'antarse por duplicado el acta ele lo obrado y remitir un ejemplar debidamente autorizado, q u e se conscn·aría ,,;n e! A r chi\'o ele la Secretaría Arzob;spaL La primera piedra del templo parroqu ial se colocó el .?.7 ele fe– lJrero ele 1916, reinando en Roma Benedicto XV, siendo P.relad u diocesano D. Juan Ignacio González Eyzaguirre y ocupan do la Pre– sidencia ele la l{epública D. Juan Luis Sanfuent<es, teniendo como :1.fin istro ele Culto a Don Ramón Subercaseaux. Era tan notable el acontecimiento, que el P. Legarcla quiso en– arbolar el Pabellón Nacional, y el 26 de febrero, dspera ele la ce– remonia, el Intendente de V,dparaíso dictaba un edicto: Visto la solic itud adjunta, concéclese permiso al P. José de Legarela para que pueda enarbolar el Pabellón Naci onal el próximo día 27 en el recinto del nueni ConYento de PP. Capuchinos con mot ivo de la bendición y colocación ele la primera piedra de la Igle– sia que se proyecta ·erigir en \ - illa l\foclerna. - Anótese y conrnní– quese. - Pinto Cruz. Ya el 29 de julio de 191-1- el Ministro de Relaciones Exteriores decretaba el nombramiento ele D. Bartolomé Palacios y lJ. Alberto Si,lva l\Iartínez para integrar la Comisión ele fábrica de la Parroquia de S. Miguel ele Villa Moderna . Las obras ele la Iglesia continuaron hasta 1919 y estaban adelantadas. pues llegaban hasta los \'·entana– les . Después hubo que abandonarla por falta ele recursos económicos hasta que en 19::27 pudieron contin uarse con la mudificacit'm del pri>– yecto primitivo y te rmin arse en 1933. El primer período (1916-1 9 ) correspondió actuar como Su¡ie– rior del co1ffento y ele la obra al R. P . l{emigio de Pamplona. En el período final, 1927-33, estuvo todo a cargo del P. José ele Legar– cla. Es benemérito a este respecto el Hermano Fr. Enrique. que ah– negaclamente se ofreció a pedir ele p uerta en puerta los necesarios medios para continual'se la hermosa obra que durante ocho años permanecía parada. 1.· a se habían agotado los primitivos recursos proYenientes de Santiago. La inscripción ele varias familias no afron– taban graneles medios. La 'Deso r e rí a fiscal que por decreto del Mi-