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100 FU/\DAC'IONES EN ARGEXTJNA Y CHTLE ele 40 huasos durante las 1--1- leguas hasta el oratori o de S. Fran– cisco de Pau la, donde iba a darse la misión. Hubo más ele mil co– muniones. Aq uí les ocurri ó el caso ele llamarle a co nfesa r al pairecitD de una distancia ele 15 leguas para un hombre de noventa años que ;J fin parecía estar chocho ... o como aquí dicen, les o . . . De ahí se fueron a S. Pelasco acompañados ele 30 h uasos en u na Jornada de :?O legu as a caballo. A la mitad del camino los mi sio– r,eros compadecidos de sus acompañantes les orde naron Yolver. T o– dos los huasos se arrodillaron y retiraron obed ient es con la bendi– ción de los Padres. "Pasábamos por la s ca ll es y nos arrojaban flores"' dice u n mi– é- ionero en su carta. Se lograron --1-.000 confesiones . La procesión que orclenú el P. Vicente de ülbún pasó por debaj o ele 30 arcos ele– folla je y flore;;. 1\l tomar el coche para ir a otro puebl o colocaron t:na corona sob re cada asiento ele los misioneros, lo mi smo que aI ex teri or ... Cuatro sobe r bios caballos tiraron del coche y 50 hua sos. hacían la escolta . En San Clemente, dond e dieron su quinta mi sió n. las campana s. ;:m unciaron alegremente la ll egad a de los mi sio neros. El pueblo se ,-,en tía fel iz. Hubo 3.000 Comuni ones. Al retirar se cla maba la gente : '' L'or Dios, PP., no se Yay a n VV., no no s dej en' '. ¡ \}ué consuelo r ec i – bir ían los mision eros! El 11 de octubre ele 1890 sal ieron el P. Alci ra y el P. José hacia Curicó. Al llegar a esta ciudad se Yieron so r pr end id os por ser día de elecciones ele diputados. Entonces los elementos adversos lan– zaron la idea ele que aqu ell os fraile s eran gente política al se rvici o– d,el candidato catól ico. Sin embargo en carta del P. Alcira se dice qu,e el co ncurs o fué notabilísimo, que hubo 3.000 Comuniones y 30 matrimonios ele amancebados. De allí fu eron a Villalegre, donde ce lebraron la mi siún a campo libre. P ues no había nada, ni altar, ni Iglesia, ni nada ... Con u n cajón arreglaron u n altar y con u na. t ela ele la casa, en que se hospedaban, formaron retabl o que bi,en parecía un lienzo al óleo . Comulgaron a pesar de t odo 1.700 fieles. De este punto corrieron a otro distante 50 leguas de viaj,e a caba ll o y coche. A l pasar el rí o Mataquito dió v uelta la embarca– c.iún quedand o suspe ndida ele un cable. L os mi sioneros salieron del paso si n sandalias y con los hábit os bien mojados. Después ele r•e-