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BIENVENIDO DE ARBEIZA Con fecha 9 de febrero de r896 fue confirmado en dicho cargo por el Rvdmo. P. General y, algo después, le escribió el Rvdmo. P. Llevaneras, diciéndole que sobre todas las ra– .zones que presentaba para renunciar a su cargo, había una razón poderosísima para admitirlo y esta era la disposición de los Superiores y añadía. "No nos contriste más renun– ciando al cargo con pretexto de juventud... no me hable más de estas cosas y sea Superior de Manila mientras la Obe– diencia no disponga otra cosa 8 • Lo de Ponapé. Apenas llegado a España el Rvdmo. P. Llevaneras, tuvo lugar la insurrección de Ponapé. asesinando al Gobernador Sr. Pasadillo, y siendo muchos los soldados españoles muer– tos y heridos. El incidente de Ponapé fue bandeado por la prensa iz– quierdista liberal de España y Filipinas, lanzando contra los misioneros capuchinos caprichosas acusaciones de intoleran– cia, dictadura espiritual, etc. Dice a este propósito el Rvdmo. P. Llevaneras: "Como el asunto iba tomando un carácter poco favorable, he tenido que personarme en Madrid para hablar con el Ministro de Ultramar, a fin de colocar los hechos en su lugar. .. De este modo la prensa imparcial y la sana han tomado la revancha, colocando vuestro nombre a la altura que merece ... "Hasta la Gaceta Ministerial habla bien de los misione– ros ... Muchos envidian los trabajos que habéis sufrido" 9 • Los periódicos de la izquierda en Filipinas siguieron aún 8. Apuntes del P. Juan M.ª de Ansoain, pág. 36. 9. Cfr. Carta al M. R. P. Saturnino de Artajona, Nov. 15, 1887. 42