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BIENVENIDO DE ARBEIZA dado por escrito sus quejas y proyectos de reforma, casi todos hablaron de este punto importantísimo... Enviado a Roma el informe del Visitador, inmediatamente se puso remedio a la anómala situación, declarando vigente en la Misión de Filipinas el Estatuto de Misiones y nombrando al primer Super:or Regular con sus Discretos que fueron: el M. R. P. Daniel de Arbácegui, Superior, y Discretos los PP. Alfonso de Morentin y Francisco de Santibáñez ... Así de un golpe se arreglaron muchas cosas... Desde este mo– mento el Superior de Manila tenía ya las manos libres para resolver muchos problemas, suprimiendo la correspondencia voluminosa, molesta y las quejas y críticas de los religiosos. Al M. R. P. Arbácegui le sucedió el M. R. P. Pedro de Saló, catalán, hasta el año r914, en que la Misión íue en– comendada a la Provincia de Navarra, siendo Superiores de ella sucesivamente los MM. RR. PP. Ricardo de Torres, Vi– cente de Pamplona, Pedro de Rentería, Lorenzo de Alegría, Joaquín de Inza, Eusebio de Azpilicueta y Félix de Igúz– qmza. En abril de r937, en virtud de un decreto del Rmo. P. General Vigilio de Valstagna, fueron abolidas todas las Misiones "latiore sensu", entre las cuales estaba incluída la Misión de Filipinas, quedando convertidas en Custodias y rigiendo en ellas en vez del Estatuto de Misiones, las Consti– tuciones de la Orden. Se suprimió entonces la dependencia directa del General, y la Custodia comenzó a depender <lel M. R. P. Provincial. Algo después fueron nombrados : Cus– todio el M. R. P. Florencia de Lezáun, y Asistentes los MM. RR. PP. Bienvenido de Arbeiza y Félix de Igúzquiza, con fecha de 8 de mayo de 1939. 298

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