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LOS CAPUCHINOS EN FILIPINAS Ordenado de sacerdote el 6 de abril de 1878 y contando 26 años de edad, se dio muy pronto a conocer como misio– nero popular; sus frases valientes y certeras, inflamadas por el celo ardiente de un corazón seráfico en la plenitud de su vida, caían como ascuas ardientes sobre el auditorio, grabándose indeleblemente en su imaginación y en sus co– razones. Aún no había cumplido los 30 años 1 , cuando por De– creto de la Sda. Congregación de Obispos y Regulares, 8 de marzo de 1881, fue nombrado COMISARIO APOSTOLICO de to– da España. Sus raras dotes de gobierno, puestas en juego por una actividad prodigiosa y dirigidas con fina y hábil política, dieron muy pronto espléndidos frutos. Procurador de las Misiones. Algunos años más tarde, por razón de las relaciones en– tre las colonias de Oceanía y el Gobierno de España, se fundó en 18 de diciembre de 1889 el DISTRITO NULLIUS en l. Nació el 14 de abril de 1852 en el pueblo de San Andrés de Lle– vaneras, provincia de Barcelona, y vistió el hábito Capuchino el 25 de julio de 1871 en Guatemala, América Central, a donde fue a reunirse con su hermano, el futuro Cardenal Vives, y otros religiosos Capuchinos que allí fijaron su residencia después de la revolución de España, 1835. Hizo su profesión solemne en S. Francisco de California. Volvió des– pués a la provincia de Tolosa (Francia) para estudiar la filosofía; antes de un año, tuvo que volver de nuevo al Ecuador, donde prosiguió la carrera eclesiástica, ordenándose finalmente de sacerdote en España el 6 de abril de 1878 y dedicándose inmediatamente a predicar misiones populares, que le dieron justa fama y nombre. Uno de sus admiradores no duda en llamarle, "Varón de humilde origen, pero grande en pensa– mientos, elocuente en palabras y admirable en hechos". Lástima grande que hasta la fecha no se haya escrito una monografía completa de este ilustre Capuchino. 183