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- 67- D. Cayetano Carrascal. - Contrasta con la aus– teridad del P. Eusebio el simpático viejecito D. Ca– yetano Carrascal y Delgado, a lo que parece Canóni– go Tesorero de la Catedral de Córdoba. Las ca rtas del Beato Diego a este siervo de Dios son pocas, pero rebosantes de gracia andaluza. Debió ser primo del autor de «Los Desengafios Filosóficos », Valcárcel, según se desprende de sus cartas; y de ellas también se deduce su gran virtud y su generosa ca ridad para con los pobres. Insertamos varias cartas del Beato al simpático Tesorero, por el estilo de las del P. González: T J. M. y J. Ronda 4 de octubre de 1790. Sr. D. Cayetano Carrascal y Delgado: Mi sefior amadfsimo, amigo y dueño de mi mayor veneración: Acabo de llegar de un largo viaje a los Puertos y a Sevilla, y de recibir la muy apreciable de ustP.d del 3 del pasado , que, como todas las suyas, me llena de consuelo por lo que Dios hace con usted y conmi– go, siendo yo el que soy. Váyase enhoramala la ton– tísima vanidad, pues nos basta saber que ni es de usted lo que Dios le da y puede quitarle, ni hay en mi cosa alguna para que usted me mire a la cara, ni aun para que se acuerde de este asqueroso escuerzo, fuera de mi necesidad. ¿Qué le parece a usted, Te– sorero mío? ¿No digo bien? Yo aseguro que si las bio. Contiene datos preciosos, y es de desear que se imprima, pues ciertamente lo merece. (Archivo del Bea– to Diego).