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-481 - que en la prox1ma P ascua tengo que predi car en Ronda en una Misa nueva ., ,:,aldré de aquí el Viernes de Dolores, Dios mediante, luego que predique el sermón de aquella feria, que me ha encargado el Santo Tribunal de la In quisición . (1) » El P. Alcober nos ha conservado los esquemas de los sermones, predicados en la Misión de Sevilla. Copiamos el primero de ellos, como una muestra de lo que fué su predicación, omitiendo los demás por su extensión demasiada: « Día primero. Por haber sido la tercera Misión hecha allí, sirvió el tema: Ecce tertio hoc venia ad vos : in ore duorurn ve! trium testium stabit omne verbum (ll Corint. XIII, 1). Fué la idea la consideración del gran bien que Dios nos hace en la Misión , y los males que debemos te– mer, si de ella no nos aprovechamos. Prime1 a parte: El bien de la Misión, atendido al estado actual del pue– blo y a la relajación en las costumbres por los cuatro vicios mayores impiedad, hipocresía, codicia: y so– berbia, y ya de ingratitud a los pasados beneficios y mirando los fines de nuestra conversión o de justifi– car Dios su causa, a que la Misión se ordena. -Se– gunda parte: Presenté los males que deben temerse temporales, los que ahora se suspenden, y los de mayor rigor y espirituales, y el divino desamparo que debe temerse, y que se haga Dios sordo a nues– tros clamores y de sus santos. » (2) También nos ha conservado el Padre Alcober los esquemas de los Ejercicios al Clero, interesantísi– mos y distintos de los de Zaragoza. Milagro del don de lenguas. -Ocurrió en esta Misión en caso notable, que insertan el P. Luis An- (1) Cartas de conciencia, 24 de marzo de 1792. (2) Historia de la vida interior y exterior del Beato Diego José de Cádiz, por el P. Alcober, pág. 216.

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