BCCCAP000000000000000000000177

-338- diz, en el sermón de Pasión que predicó en la Cate– dral de Sevilla, entre las siete de la mañana del Viernes Santo, profirió las proposiciones siguientes: «Entre las aflicciones de Alma y Cuerpo que Cristo, nuestro Rede.ntor, tuvo en su sagrada pasión y muerte, fué la mayor de todas el verse quitar sus vestiduras, (único patrimonio de S. M.) rasgarlas y repartirlas entre aquellos a quienes por ningún tér– mino pertenecían por ser propiedad del Señor. Aho– ra ¡cuánto más sensible seria en el día a su Divina Majestad el ver las cosas de la Iglesia repartidas en– tre aquellos a quienes no corresponden y aplicadas a los fines a que no fueron determinados desde sus principios! Sabe también S. M. positivamente que dicho Religioso tiene ideas contrarias a los piadosos esta– blecimientos que se promueven en su feliz Gobierno, con cuyos antecedentes deben combinarse sus de– claraciones. Sin embargo , quiere S. M. creer que la sinceri– dad y virtud de Fr. Diego de Cádiz han sido sor– prendidas por personas mal intencionadas, y ha re– suelto se dé por fenecido este asunto, insinuando a dicho religioso , por medio de V. P. R., procure con oportunidad y prudencia desvanecer cualquiera mala impresión o inteligencia que se haya dado a sus pa– labras, y evite hablar de las cosas que coincidan di– recta o indirectamente con las disposiones del Go– bierno, que deben venerarse, y huir de toda crítica sobre ellas, aunque no es dudable que su ánimo o intención habrán estado muy distantes de estos ob– jetos. Lo participo a V. P.M. R. de orden de S.M. pa– ra su inteligencia y cumplimiento, dándome aviso de ello .

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz