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-314- :go pone delante de usted; y así, por el amor de Dios, pido a usted haga el remedio siguiente. Este es que, Jeída esta carta, caminar a la oración, y allí verá usted con lo que la bondad de nuestro Dios lo recibe _y manifiesta, así que a S!!S divinos pies se pongn usted, y ponga las estatuas y fantasmas que le hacen sombra, para ver lo que Dios le ama y cuida. Pues siendo el punto pri,Ícipal el de buscar Di– rector, lo tiene el Seiior buscado de antemano y ,deseando dárselo a usted, espera sólo que usted lo pida de corazón, y sin más cuidado de lo que el enemigo quiere, pues pide éste lo que no es fá cil a usted ni a mí encontrar. No hay hombre que no sea capaz de todo sin falta, y esto sólo Dios puede cono– cer el que nos da. Y siendo (si no me engaiiu) dado por el mismo Señor, no dudo será falto en nada, pues si no me engaiio lo conocí así. Explicaréme con mis estudios. Estos son hacer calcetas o hilar. Para estas labores se experimenta 1o siguiente. Se está haciendo la media, y parece ha de durar el acabarla; mas no es así: se llega a ver su -fin . Y ¿qué se hace? ¿Se para? No por cierto, que lo -que se hace es tomar el ovillo y saca r otro, y antes que se acabe el quebrado, poner los dos juntos y se– _guir la labor con los ctos; mas, después de puesto, se sigue con el que se puso, en lugar del que se quedó, y se siglle sin que se conozca imperfección en la labor. ¡Bendito para siempre el Señor todo amor, -que, si no me engaiio, así lo ha hecho con usted! Y -esto es una de las cosas que el enemigo no quiere vea usted con la claridad que creo yo lo verá, si no padezco engaño. No creo se le ocultará a usted favor tan grande como este, de dar Dios antes de la necesidad el remedio. El enemigo procura que este cabo no lo coja