BCCCAP000000000000000000000177

XIX Todas estas razones nos han movido a intentar escribir un s vida , según las exigencias de la crítica moderna y el gusto de nuestros ti empos. El Beato Diego ha vivido hssta ahora de la tradición . Los a ncianos, que hemos conocido, descendientes de la generación contemporánea del Siervo de Dios, con– servaban con cariño el recuerdo de su elocuencia y sus mil agros. Su memoria, su devoc ión y hasta la amistad que sus mayores tuvieron con él han obra– do en los fieles de Andalucía como preservativos de su fe, y a nosotros mismos nos han enseñado desde la cuna a conoce r sus hechos, y a profesarle un gran cariño, en el que se mezcla la admi ración al P. Caa– maño. Ahora bien, esta generación va desaparecien– do , y vienen otras nuevas, que no conocen la figura del Beato Di ego, ni menos la deuda que con él ti ene contraida Espaila. ¿Hemos de dejar perecer su me– moria? ¿Dejaremos que España olvide al campeón de su fe, al Apóstol de los ti empos modernos, ll a– mado nuevo Santiago por León XIII? ¿Renunciare– mos a despertar en la juventud la emulación del apostolado, y mucho más no habi endo acabado la lucha que él ini ció contra la revolución moderna? El escribir la vida del Beato Diego ofrece serias dificultades. Si nos limitamos solamente a coordinar los documentos, resulta fa lta de animación y colori– do, pues, si el documento revela con encantadora in– genuidad el interior de nuestro heroe, en cambio empequeñece su humildad los mayores triunfos. He– cho tan ruidoso, como el milag ro del rayo en Morón, im 19 Jahrhundert. -Einsiedeln. - 1S2 1. - Apuntes bi ográficos sobre la vida del esclarecido apóstol B. Diego de Cádiz. - Montevideo.-1 893.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz