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vm Los restos de fray Alejo.-Su nombre, en los monumen– tos a los Capuchinos mártires.-Tienen confianza en su protección.-Se pide la beatificfl,ción.-El proceso in- formativo. Se sabe con certeza que fray Alejo fué martirizado en el cemen– terio de Jove, pues cuando trasladaron los presos a la tglesia de San José, también fui con alguna compañera a llevarles la comida; pero ya no estaban allí, los habían matado; sólo quedaba el Coci– nerín, según .nos informaron los carceleros de la iglesia-prisión. Si, pues, solamente quedaba el Cocinerín, es evidente que todos los demás fueron asesinados, y por lo mismo, también fray Alejo. ~Me consta que asesinaron a todos los Capuchinos que estaban .conmigo presos, menos al Cocinerín, como después comentábamos, lamentando su muerte, el dia 14 de agosto, en el cementerio de Jove.» Con todo, y a pesar de las diligencias repetidas para encon– trar e identificar los restos del hermano mártir, no fué posib-le dar -con ellos, por no encontrarse más que montones 1nmensos de restos humanos en las dos fosas en que enterraron los cadáveres de tantas víctimas sacrificadas por -el odio a lo honrado, a lo bueno, a lo santo, a la religión y a Dios. El nombre de fray Alejo se halla esculpido en las tres lápidas fijadas en lugares santos para perpetuar la memoria y las virtudes de los mártires. En la segunda lápida del cementerio de Jove, en una de las muchas colocadas en el atrio de la iglesia de los padres Jesuítas y ·en la de la iglesia de los padres Capuchinos de Gijón. cDesde hace unos años, y sin saber que se trataba de introducir la causa de beatificación y sólo por la opinión de santidad que para mi tenía, vengo encomendándome en diversas dificultades, y de to– das .me ha librado fray Al-ejo, a quien conocía muchísimo toda mi familia. Con el deseo de verle pronto en los altares, manifiesto estos datos.» (Flora R. González.) «Yo también he comenzado a encomendarme a él, y me han sa– lido bien las cosas, y espero que me resuelva asuntos de 'importancia a él encom.endados. Quiera Dios le veamos pronto en los altares.» (A·lejandro Ripoll.) Con el de los otros mártires Capuchinos de Asturias fué tramitado también el proceso informativo de beatificación del siervo de Dios fray Alejo de Terradillos y entregado a la Sagrada Cong.regación 288
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