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36 P1\RT. l. CAP. 1I: OISTRIBCCJÓ:-1 SEMANAl, DEL TIEMPO 83. Los estudiantes hasta terminar sus estudios, y los hermanos legos hasta cumplir los seis años de profe– sión, si hubieren faltado al Oficio divino o a algún otro acto de comunidad, o hubieren llegado tarde al mismo, así como si hubieren roto o estrope¿-¡do algún objeto, aunque sea involuntariamente, irán a la celda del P. Di– rector respectivo, y, arrodillándose, dirán: Digo, Padre, mi culpa de que he faltado ... o llegado tarde, verbigra– cia, a Vísperas, o de que he roto tal cosa ; y, recibida la penitencia, que podrá ser de un Padrenuestro y Avema– ría, u otra mayor si el religioso es descuidado y negli– genta., volverán a su celda o a sus ocupaciones. Esta penitencia debe cumplirse privadamente. Los novicios harán esto mismo ante el P. Maestro . Si la falta fuere notable o con frecuencia repetida, conviene que los PP. Director o Maestro den cuenta al P. Guardián. El Superior puede con prudencia y moderación casti– gar públicamente en el refectorio al que con frecuencia cae en tales faltas públicas, imponiéndole por penitencia, verbigracia, que diga cinco Padrenuestros y Avemarías con los brazos en cruz, que coma arrodillado en tierra, o cualquiera otra pena paterna a tenor de nuestras Cons– tituciones t. M. Modo de decir la culpa.- Cuando toda la comu– unidad dice la culpa, obsérvense las siguientes ceremo– nias: concluído el rezo del De profundis, el P. Supe– rior se levanta, y, a una señal del mismo, el religioso lego menos antiguo, inclinado profundamente y juntan– do las manos delante del pecho, dice. Digo, Padre, m.1- l Con,~~.
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