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Sacerdote y estudiante en Roma 1939-1942 75 El narrador cuenta lo que se ve, pero sucede que lo que no se ve es tam– bién realidad. Llegarán los 50 años de sacerdocio -ya hablaremos- y en una de las celebraciones, una misa en la intimidad, aparte de dar gracias por el don del sacerdocio pedía que le ayudasen a creer en su sacerdocio. "Recuerdo que cuando recibí la ordenación sacerdotal en 1939, después, cuando me encontré a solas en mi habitación tuve que hacer un actO de fe. Me encontré el mismo de antes; aquellas manos consagradas no habí– an cambiado, ni había cambiado mi cuerpo exteriormente, ni había cam– biado mi mente. Era yo el mismo de antes. Me costó trabajo; no sé por qué. No es que yo me imaginara que iba a suceder ningún milagro, pero casi tenía cierra esperanza de que yo mismo lo iba a experimentar, expe– rimentar el cambio. Más bien me avergonzaba de pensar que los demás venían a besarme las manos; venían a besarme las manos mis hermanos y todos me ayudaban a creer. Me trataban de una forma nueva..." 51 Días de gloria y victoria Eran días de gloria y victoria, de euforia nacional. Tras la "redención" de Madrid (28 de marzo), la Guerra se terminó con el último parte, fir– mado por el Generalísimo Francisco Franco en Burgos. el 1 de abril de 1939, desde ahora Día de la Victoria. Tedeum y arengas... Los misacanta– nos iban celebrando sus Primeras Misas, y el domingo 23 de abril, que se terminó el Triduo Eucarístico de acción de gracias por la Victoria, celebró su Primera Misa Solemne el P. Bienvenido de Arbizu, el úlcimo de los siete ordenados este año. "Y por la tarde hubo una gran manifestación popular-religioso-patriótica, que solemnizó la banda de los Pelayos, y el P. Ruperto d irigió una arenga a las multitudes desde una tribuna improvi– sada a la puerta de San Pedro. Menudearon vivas y vítores a España y al Caudillo"ll A l día siguiente era San Fidel de Sigmaringa. Después de cenar hubo una velada en honor de los misacantanos. "Al fmal habló en nombre de los nuevos sacerdotes el Rdo. P. Lázaro de Aspucz y se clausuró el acto con el Mañana en un frágil barco"~<. " Homilia cranscrita de una grabación magnetofónica. ·Véase en el capículo final: Ayudadme a creer e11 mi su(·ercluciu (nota comspondieme). » Crónica 11. en el día 26 de abril de 1939. ,.. Crónlctt 11. ibídem.

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