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Bien, aletvo bueno y fiel 347 La casa del P. Lázaro -para entendernos- no es ya la casa donde nació Romualdo o donde vivió su infancia, que se halla un poco distante del actual emplazamiento. La casa de hoy es una hermosa casa de piedra, muy amplia, con tres plantas, de legítima madera en pisos y en la obra de car– pintería. Muy orros fueron los tiempos de hace setenta años... Los hijos de María, la hermana del P. Lázaro, y de Plácido, el marido lleno de vimlidad e iniciativas, pueden volver tranquilos a l hogar paterno, porque cada uno hallará su cuarto grande con las comodidades precisas. Adosada a la casa, y haciendo cuerpo con ella, hay un garaje con la maquinaria de trabajo, cuya techumbre es el piso de una espaciosa y soleada terraza. - Esa ventana que da a la terraza es la habitación del P. Lázaro, nos dice Plácido. Aquí se encontraba feliz. Por la mañana se daba un paseo por ahí -indicando el río Salazar, que a cuatro pasos corre entre los repliegues del monte- rezaba, volvía, almorzaba bien...; le gustaba sentarse aquí y leer... En fin, estaba muy comento. La fiesta de las Bodas de Oro sacerdotales (abril 1989) Un acontecimiento de gratfsimas e intensas emociones para el P. Lázaro fue la celebración de sus Bodas de Oro Sacerdotales, 9 de abril de 1989, a los pocos meses de llegar a Frascati. De nuevo somos afortunados para dejar que el mismo homenajeado, abriendo como un niño e l corazón y bien lejos de una posible biografía, nos lo cuente. * * * ¿Cómo fue la fiesta? ...Comienzo por decir que el correo de Frascati estuvo por más de dos semanas ocupado por mi causa; ya conocen bien mi nombre: cartas a docenas de capuchinos y capuchinas y otras religiosas, muchas de e llas con ramilletes espirituales y bellos d ibujos; más de vein– te telegramas, entre ellos uno con la bendición del Papa... Otro del car– denal Palazzini, Prefecto hasta ahora de la Congregación de los santos, que lamentó no poder venir a presidir la fiesra, como yo lo había invita– do, porque tenía otro compromi:.o, pero vino una buena representación de los directivos de la misma c~mgregaciónm. En cana del 23 de marzo de 1989 lamentaba el cardenal no poder <>tat en Frascati el din 9 de abnl. eompromeudo yo con una conmemomcoón en Frascati del llorado P. Trape. En una carta poste– nor. del S de junio. k d1ee que espera encontrarlo en Ciuit di Castello en la fiesta de S,nta Verómca. y podrá repetirle de Vl\'3 \OZ las felicllacooncs de la fiesta. Véase AHPCP. Ló=aro lriarte, carpeta per– ;,onal.

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