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Abierto a la Iglesia santa 317 historia forman una red cupida. Ciñéndonos a lo que hoy existe, está la T.O.R. de varones (Tertius Ordo Regularis), que profesan una regla pon– tificia basada en los escritos de San Francisco, y hay infinidad de congre– gaciones religiosas (de derecho pontificio y de derecho diocesano) que profesan la regla de la Tercera O rden en calidad de verdaderos religiosos y religiosas. Tras el Concilio se ha escrito una nueva Regla para la Tercera Orden Regular de hombres y mujeres, regla aprobada en 1982 por Juan Pablo !l. Ylos seglares, hombres y mujeres, casados o célibes, que buscan la vida evangélica al estilo de Francisco, forman parte de la Tercera O rden; son los terciarios, la Venerable Orden Tercera, actualmente la O.F.S., la Orden Franciscana Seglar, también con su regla actual, nueva tras el Concilio, aprobada por Pablo Vl (1978). Si todos estos brotes nacidos de una savia común -San Francisco- los juntamos en un solo árbol para saber lo que es la Familia Franciscana, contemplaremos que aquella semilla del Pobre de Asís ha florecido en centenares de ramasl08. Estas noticias eran necesarias como información previa para presentar ahora la tarea del P. Lázaro en una obra que se iba gestando. Todo este amplio movimiento franciscano ¿no podría tener algún cauce unificado cuando se tratara de dar una voz común, una declaración de rodas los her– manos y hermanas de la gran familia? La unidad de la fami lia, no jurídica sí espiritual, esa especie de "ecumenismo franciscano" (que así se le ha lla– mado, aunque no habrá que insistir en la expresión) era algo que se afian– zaba cada vez más de por sí, como signo de los tiempos. En 1979, como motivo de los 750 años de la fundación de la Orden, profesión de Francisco a los pies de lnocencio lll, los rres ministros generales de la Primera Orden renovaron sus votos religiosos en manos de Juan XXIII. Vinieron, como lo relatamos en su lugar, las canas conjuntas de los minis– tros generales, agregándose el ministro general de la Tercera Orden Regular. Y con motivo del VIII Centenario del nacimiento de San Francisco se lanzó aquel hermoso mensaje a toda la familia franciscana "He concluido mi tarea; Cristo os enseñe la vuestra", firmado en Roma, ,.. Véase en la Historia Fr(mciscallll del 1'. Lázaro lriarte. por lo que reSJ>C<'ta a las congrcgacio ncs masculinas y femeninas de derecho pontificio penenccientes a la Tercera Orden la lista de abun– dantes páginas de las fundaciones que han surgido a lo largo de los siglos. En una exposición del 28 de marzo de 1994. a la que luego nos referiremos, el J>. Lázaro, hablando de la Tercera Orden Regular. decia: ..Baste decir que. solo las congregaciones de derecho pontificio, suman alrededor de 230, a las cuales hay que agregar los instituto de derecho diocesano, lo que da un total de 357". "" Véase en Seleccio!les de Francisca!lismo n. 29. año 10 (1981) 1-3.

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