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Por Santa Clara y las hermanas capuchinas 249 Comisión inremacion<Jl de Clari$as Capuchnw reunida en ROTM para la revisión del rex10 definilivo de sus Can.!rirucÍ<me$. 17-25 de fellrero 1974. Columbano McGarry (de la comisión para las monjas en la Congregación de Religiosos) y P. Cadamonio Pastorella (asistente de la federación ita– liana). En la primera reunión examinaron lo que se había hecho y lo que que– daba por hacer. Sobre la mesa un cuantioso material de las respuestas a la consulta y hasta siete proyectos completos de texto renovado y varios pro– yectos parciales, procedentes de nueve naciones. "Había que comenzar por decidir una cuestión de principio: ¿conservar el criterio de un texto único para todas las clarisas capuchinas, con la posibilidad de darse direc– torios propios en cada nación o conferencia?, ¿constituciones nacionales o regionales?, ¿un texto único para todas las clarisas que siguen la Regla de Santa Clara?" 36 ' Los cinco expertos, al son de lo que parecía ser un sen– tir común, optaron por trabajar con la dirección de un texto único para todas Capuchinas de la 11 Orden. En mayo de 1973 se pudo llegar a la elaboración del texto general uni– ficado, fruto de la colaboración del 95 o/o de los monasterios de las siete zonas lingüísticas. El texto se distribuyó a las monjas para que fuera minu– ciosamente discutido en monasterios y federaciones. Y en este punto entró en acción una Comisión Internacional de 18 Capuchinas que, reu– nidas en Roma con la Comisión de los hermanos, del 17 al 24 de febrero _, Pax el Bommr 2 (dic. 1970) 2-3.