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Consejero de la Orden, a la escucha del Eaplritu 241 estamos hablando del capítulo y ambiente en los que situamos a nuestro biografiado. Hubo una gran crítica frente a esta encuesta por el dispendio econó· mico que había supuesro y los mismos resultados. Por parte del provincial de Navarra, tras el capíiUlo, una protesta, por los resultados no aceptables a los que se llegaba de modo global al decir de una provincia punrera (505 miembros) que la mayoría de los frailes no creían en al vitalidad de la O rden' 46 • La consulta hizo saltar chispas..., y al final, su utilidad, pese a la montaña de buenas intenciones, no ha podido verse en frutos apreciables. Los momentos más densos y entrañables del capítulo vinieron del papa Pablo VI -de bendita memoria·. El Papa envió al ministro general una carta con ocasión del Capítulo (20 ago to 1974)" 1 , marcando las directri· ces espirituales de nuestra renovación, y tuvo una audiencia cord inlfsima para los capitulares (30 septiembre). El Papa leyó su discurso en latín, pero tuvo como otro discurso esponráneo, manifestando su cariño a los capuchinos -no en vano son los custodios de la tumba de sus padres·, y constantes glosas al textoH•. Todo esto último en italiano. Balance de seis años No pensábamos que hablando de e te período nos íbamos a demorar tanto. No habrá sido en vano, pues, como hemos dicho, dábamos el retra– to del P. Lázaro fund i<!ndolo con la historia apasionada de la Orden en estos años convulsos. ¿Cómo se encontraba la Orden? ¡Podía decirlo un estudio sociológi· co...1 La Orden llevaba dentro una herida dolorosísima. En el primer decenio postconciliar 1966- 1975 había habido 7 16 (setecientos dieciséis) hermanos sacerdotes que habían pedido la secularización... El P. Lázaro, por encargo del P. General había preparado ese informe' 49 • Adiós al sexenio ~Véase: Ct1rta del Patl~ Aurelio /...uita, minntro prv•'indal. soblt' ti estudio paro lfUí!stra pro--– vincia prr:paratlo por la Comi.<ión gcneml partl ~/ eslatla tle rr:now•ci6n ele /(¡ Orden (O u rinda, 28 octubre 1974). en: 8r>l. O.f. 28 (1974) 214-219. Según los resultados "mulli dei fnni di Nnvarru. quasi la loro magaiomnza. scmbmno non credcre alla vitalit~ deii'Ordine. E. cosa ben piu importante. non sc:mbrano eonvonti del ,.aJore stesso ddla vita reltaoosa... gli intcrvostatt non ritengono che \>alga la pena' nere una vna religiosa" (p 217): a conttnU3C>ón el ministro pro-.ncial hace su crittca "' Cima tle Su Sómidotf Pablo VI t1/ MinisJro General con OCil<ión rl Capitulo Generu/ «.<!mor· dinario (20 agos1o 1974), en: Bol. Of. 28 (1974) 188-192. ~· Autlic•ncia tlel Capí111/o con H1hfo VI. en Bol 0/.28 (1974) 220·226. "'Este lnfonnc, al que aludomos en Espirifll ,. fsperanza, 10. no se ha publicado. ni de nuestra panc tampoco lo conocemos. SI que pocdo dar testimonio de lo impn"10nado quequedó el P. LáT.aro ante la sineet><lad descamada de algunos tcstimonoo': tenia un profundo respeto frente al nu;tcno de los bennanos que dejaban el saccrdocoo.