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Maestro de novlcioo, 1963-1965 165 Con IOdos los nivicios. Mayo 1964 Provincial, sobre todo desde la tanda de ejercicios que dirigí a los supe· riores el año anterior. Primero se lanzó el rumor de que estaba destinado al Ecuador con un cargo; después que me hallaba enfermo, agotado, can· sado; se dijo también que era muy cerrado y personal en mi modo de gobernar... También se hizo campaña contra el P. Ricardo, que era el otro candidato probable. Llegó el Capítulo en julio de 1963. La noche ante– rior parecía fuera de duda que yo salía elegido, ya que la mayoría de los vocales no aceptaban la propuesta de los partidarios del P. Fidel. Así me lo aseguraban muchos. Yo dejaba hacer, si bien no me atraía nada el cargo de Provincial en aquellas circunstancias y aunque no fuera así, no me consideraba llamado a semejante puesto: definidor sf, para seguir mejor mi labor, provincial no. Pero aquella noche sucedió lo impensado. Trabajaron tan bien los adversarios <.le mi candidatura que llegaron a un compromiso con los Jel P. Ricardo y atrajeron a otros, echando mano del recurso ya habitual en otros capíwlos: la necesidad de impedir el triunfo de los "vascos", que tenían otro candidato. El cambio operado lo vi en los rostros de los voca– les a la mañana siguiente. Y efectivamente, quedé derrotado y excluido del definitorio. No sólo eso, sino que, como ya estaba previsto, debíamos salir del Colegio los tres profesores que no caíamos en gracia a los promo– tores de\ Capítulo. Yo lo daba por supuesto y e\ Señor me dio gracia para llevarlo con mucha calma.