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128 FORMADOR EN LA PROVINCIA (1942-1965) Con la academia de EspiriJualidad. Febrero 1948. Pese a que algunos cursos presentaban un vaivén en la estadística, se pensó en la provincia en agrandar el Colegio de Teología, una decisión que, por orra parte, afrontaba otra realidad, la de modernizar el inmueble, dotándole de nuevos espacios y poder así abandonar viejas celdas que resultaban incómodas para la vida de los estudiantes. En mayo de 1956 se empieza una obra de envergadura que terminará en 1957: se prolonga el colegio de teología con una nueva ala, edificio de tres plantas, para dar cabida a 24 celdas, 16 duchas, lavabos, aula magna muy hermosa y aula menor; biblioteca, frontón y otras dependenciasm. Esta obra, a la que se añadía en otros cuerpos gallinero, carpintería y establos hace que el com– plejo de Extramuros presente una cara muy diversa del cenobio y huerta que siempre se había conocidolll. En el área académica las exigencias de los nuevos tiempos llevan a pro– gresivas transformaciones, que vienen de instancias superiores. La consti– wción "Sedes Sapientiae" (31/V/1956) ordena los estudios eclesiásticos y a raízde su publicación el superior de la O rden, P. Benigno de Sant'IIario Milanese, publica una carta acerca de los estudios en la Orden (4 sep– tiembre 1957), a la que sigue un "monitum" sobre la organización en las m Para detalles de es~'IS obras veasc Ampliación del colegiode Teologíll. en: Bol. O/ 11( 1956) 169. "' Era el inicio de una marcha que siguió y hoy no ha terminado. Con el tiempo la nueva ala del Colegio. vaciada por dentro. seria elsoporte de la hermosa Enfcm1cría Provincial; lo que fue carpin– teria luego seconvenida en imprcnra, y después 1 oon una remodclación total, en Curia provincial. Una carrera que se produjo en los años que siguieron a la terminación delConcilio. De todo esto se habla· rá sin duda en el libro que se prepara en la Provincia para conmemorar el centenario de su restaura· ción (1900-2000).