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106 FORMADOR EN LAPROVINCIA(1942-1965) hacen los coristas, y sobre todo, lo que se hace en favor de ellos es mira– do con desvío y criticado sin consideración; el Director aparece como el enemigo naro de los hermanos legos, y algo parecido se observa en los Padres que no forman parte del Colegio. Mucho podría hablar de lo que he tenido que sufrir bajo este aspecto desde el principio del trienio. Por eso juzgo que se debe llegar a realizar la idea que se propuso al constituirse la comunidad de San Antonio: que el convento de Extramuros sea preferentemente, y aun exclusivamente, Colegio, quitan– do de él totalmente la predicación, de tal forma que todos sus moradores se den cuenta de que forman parte del Colegio. Como en este convento suele haber siempre postulantes y Hermanos jóvenes, juzgo yo que viene a ser bastante perjudicial para su formación la presencia de algunos Hermanos de conducta poco edificante; el P. Provincial salieme podrá informar sobre este particular. 3) Entre los coristas se va perdiendo la dirección espiritual individual por fa lta de a lgún Padre que se entregue con ilusión a este ministerio tan necesario y en quien tengan confianza los coristas; sería muy de desear que el definitorio pusiese remedio en este punto. Si los cuatro cursos de Teología estuvieran unidos, creo que el asunto marcharía mejor con los profesores que hay en Estella 91 . 5) La permanencia de tantos coristas andaluces y portugueses por tanto tiempo en nuestros Colegios es en mi concepto un obstáculo bas– tan te considerable para la formación de los nuestros; en el curso próximo habrá en los cursos de Teología hasta i27 forasteros!; sólo en este Colegio serán 16; para poder recibirlos nos vemos obligados a colocar a nuestros coristas en celdas casi inhabitables, por el excesivo número, además de la precisión de tener separado el primer curso de Teología con el consi– guiente aumento de personal docente. ¿No se podrá considerar suficiente ya el sacrificio hecho por nuestra Provincia desde hace tantos años con catalanes, valencianos, andaluces y portugueses? Los coristas por el P. Lázaro Justo en los mismos días de que estamos hablando y por el mismo moti– vo del capítulo provincial los esrudiantes teólogos de Pamplona -los cods– tas, que entonces se decía- dirigen una carta al P. Provincial y Definidores. '" Saltamos el apanado 4) en el que el P. Lázaro menciona a varias personas.