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Ul primera época de Pamplona (1942·1948) 101 introducido por nue~rro P. Director. Nos impuso como nervio de los Ejercicios las cuatro meditaciones diarias, dándonos en la clase a wdos rcu· nidos el esquema de las mismas para que luego las repasásemos en priva– do. Oh, y ¡qué método tan excelente es éste de las cuatro largas medita· ciones diarias para pasar con provecho los días de Ejercicios! El último día lo clausuramos colegialmente con una conmovedora consagración a la Virgen ame el altar de la Divina Pastora, madre de toda gracia.... Arrecia la austeridad En noviembre clama el cronista: "Ya vuelven los ayunos. ¡Qué destierro han sufrido los pobres durame varios años! Ahora desde luego que volve– rán con cara de Pascua, una vez que pasada la malicia de los tiempo~. ~e pueden obtener ya relativas facilidades. Mas como ni la Iglesia n• la Orden han hablado, nue~tro P. Provincial, restablece la "forma" del ayuno, sin imponer rodavía obligación de conciencia". Y añade: "Maitines. Se priva a la comunidad de los dos días en que se rezaban por la tarde (debido a la malicia y penuria de los tiempos). El Colegio, siguiendo la antigua coswmbre, dividido en dos coros o grupos, irá levan– tándose, alternativameme un día sí y otro no. El Domingo se levantará todo el Colegio. Esta nueva norma comenzará a urgtr pasada la Ocrava de la Inmaculada"'''. Parece que la guerra mundial suavizó las austeridades en la Orden, medida humanitaria y prudencial. Ahora, pasada la malicia de los tiem– pos, la O rden mntea para hallar el punro de su típica austeridad. El P. Ricardo era un religioso espiritual y observante, preciso en el derecho. Y para servicio, sobre todo, de la juvemud, había compuesto una explica– ción de la Regla, de corte canónico (por así hablar sin segundas intencio· ncs, pues tal era la tradición y el uso), explicación que era el resumen de la clásica entre los capuchinos, del P. Alberto de Bolzano, definidor gene– ral en el siglo pasado. Estos datos que mencionamos y consignamos con fidelidad histórica responden, al parecer, m~ a una consigna provincial que a una táctica y criterio del director del Colegio. Ycon todo, tenemos que subrayar la aus- -.:.~ .,.,.....r:. .... ')Oí.'~ f. ... . ,--.,11"''~ • ')í :~ \'' 1. ¡./¡.· 1...\. ~· '.... ..-.• . •:. .f'!;t ~- ··-r ~ ... ~ .. ,.,;, • Crómco 111, 2·10 no,icmbrc 1945. • Crlmica 111. fin de novocmbrc 1945.

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