BCCAP000000000000130ELEC
Apoteosis del egregio apóstol . 489 ·colapios lanzaron sus fajas' por encima de la muchedumbre para que cayeran sobre el venerando cadáver y luego las pidieron a los religiosos que lo cuidaban. »El viernes día ocho, a las diez de la mañana (añade el Padre Usún) principiamos el Oficio de Difuntos, Misa y ·oración fúnebre predicada por el Arcipreste Don Francisco Rubio Contreras, devotísimo y admirador del Padre Estec bqn. Asistieron más de treinta Sacerdotes y todo lo princi– pal de la ciudad y gentío inmenso». (!bid.) Fueron presididos los funerales por el Excmo. e Ilustrí– simo Sr. Don Sebastián Herrera y Espinosa de los Monteros, ·que luego fué Arzobispo de Valencia y Cardenal. Cuando (levantaron los religiosos el ataud y se lo lle– varon al interior de la clausura para llegar al cementerio que se halla dentro de la huerta del convento, los fieles sa– lieron del templo en tropel. escalaron las tapias y muchí– simos saltaron al interior del cementerio, hundiendo en uno de los lados, una fuerte bóveda que cubría los nichos: otros subiéronse a los árboles que dominaban las tapias. Todos querían dar el último adiós al venerable y santo Padre Esteban en el momento en que quedaba oculto a la vista ·de los vivos. Fué inhumado en un nicho construido para él, bajo tie– rra, dentro de la f apillcf del mismo cementerio y separado por consiguiente de las demás sepulturas que son nichos murales. Sobre su tumba se colocó una hermosa lápida de mármol blanco que mide 1'87 x 0'65 metros con el siguiente epitafio: .R. I. P. Ego autem sum vermis et non horno, oppro– brium hominum et abjectio plebis. Psalm. XXI, v. S.-Des– pojos del Rvmo. Padre Comisario General Apostólico en América y España de los Menores Capuchinos, Veneraple 'Padre Esteban de Adoain. Falleció el jueves 7 de Octubre ·d.e 1880, a las 73 años de edad y 53 de religión». El venerable Padre Esteban de Adoain sucumbió víctima de su enorme trabajo apostólico. Diríase que cayó como ca;e una exuberante rama que se desgaja y se inclina hacia la tierra cediendo al peso de su propio fruto . Vista en con– ·junto la labor de este hombre excepcional parece fabulosa: Orc; onizó en Cuba, Guatemala y El Salvador, diecinueve mil novecientos dieciocho hogares cristianos. Distribuyó en Cuba ochenta y dos mil comuniones. En Centro América: ·cerca de cuatrocientas mil. No hemos sumado las de Ve-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz