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O Ira vez en El Salvador 303 - ----------- -------------- hubiera echado el cuerpo airas, alegando mil razones de ·prudencia. · . . .¡Padre Esteban! -hubieron de susurrar a sus oidos al– gunos religiosos- no hace más de cuatro años que vuestra paternidad vino de El Salvador entre bayonetas. Esta vez va a dejar la piel allí; porque según cuentan, aquello está muy malo. El partido barrista va a estallar. La revolución es cosa de días, no se exponga a una catástrofe•. El Padre Adoain, por toda respuesta, preparó ~l estan– darte de la Divina Pastora, tomó su crucifijo, y preguntó: -¿Con quién voy? -Con el Padre Francisco de Bossost, con el Padre Ber- nardino de Capellades 'y con el H2rmano Crispín de Villa– longa. El Hermano Villalonga, que era algo inteligente en cons– trucciones, como suelen ser muchos legos Capuchinos, y no sentía graves apuros para freír un par de huevos, no des– . empeñaría mal papel.· Sería maestro de obras y cocinero. El Padre Capellades estaba entusiasmado con el Padr-e Adoain y deseaba misionar con él. El Padre Bossost iba para· dar quehacer a sus tres cG>m– pañeros. Con la" regla de"moralidad que se había trazado, afirmando que tcdo lo que se oponfa a su criterio era con– trario a su conciencia, y que lo contrario a su conciencia era contra la conciencia de todos, estaba dispuesto a dar un disgusto cada hora a l hombre más santo. El Padre Capellades y el lego hicieron su viaje por tie– rra, dejando al Padre Bossost con el Padre Adoain, que lo hicieron por mar. «El día 17 de Enero, dice en sus apuntes, llegué con el Padre Francisco al puerto de San José; y el diecinueve nos embarcamos en el vapor «Salvador», y el veintidós por la mañana -desembarcamos en el puerto de e La Libertad• per– teneciente a la repúbli.ca de El Salvador. · •El señor Obispo había enviado hasta el puerto a su Secn;,tario Don Jua;¡ Bértiz; y el. 23 salimos bien temprano de la aldea Cimarrón, y llegamos como a las once a S:;,nta Tecla (Nueva San Salvador). •Su señoría Ilustrísima con el Ayuntamiento y la ciudad en masa salieron a recibirnos, porque sabían que veníamos a fundar. El júbilq_que manifestaron tod03 fué extraord:na-

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