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CAPITULO XVIII EN QUE SE DA FIN AL TEMA DEL ANTERIOR 1852 NUEVOS INCIDENTES.- LOS TRUHANES AL DESCUBBIERTO.- ENTRADA TRIUN. FAL DEL P. ADOAIN EN BAYAMO.- CUATROCIENTAS SESENTA Y OCHO LE– GUAS. - EL CAPITAN GENERAL. - ACABADISIMA DEFENSA A FAVOR DEL P. ADOAIN, POR EL ARZOBISPO DE CUBA. E L día 7 de octubre se dieron por terminadas las dili– gencias testificales en Cauto-Embarcadero. Y en el mismo día fueron remitidas al Teniente Gobernador d~ Ba· yamo, por cuya orden habían sido incoadas. Este las de– volvió diciendo que necesitaba más pruebas. El día 19 co· menzó en Cauto un nuevo desfile de · testigos, que duró hasta el ' 27 inclusive. Comparecieron 24 personas. No fueron pocas las que, guiadas por su conciencia, declararon a favor del Misio· nero, dándose el caso curioso de que las mujeres testifi· caron lisa y llanamente los hechos, en contra de lo que de– cían algunos de los hombres. Doña Francisca Herrera, desmintiendo lo dicho por un testigo, demostró que se casó de buen grado con Isidro Dor– mido y que no era cierto que éste la abandonara luego de la ceremonia nupcial. Rosa Castro dijo que su matrimonio con Angel San· tisteban fué voluntario por ambas partes, aun cuando ella fuera de raza inferior. Rosa Osario, ·mulata de condición, expresó que no fué llamc.da por nadie y menos por el P. Capuchino, el cual no la obligó con coacción a legitimar matrimonio alguno.
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