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Prodigioso apostolodo en C-'-'-u-'-b-'-a_______ IS'-5'- forja el caracol marino y llamó repetidas veces a Misión con un ronco zumbido prolongado, que retumbaba por la dilatada campiña. Improvisaron los misioneros un altar y un púlpito y aquella misma noche comenzó la Misión. Al día siguiente hubo un concurso respetable en las dos Misas. ¡Pobres gen– tes! No habían visto nunca una Misa; no habían oído nunca un predicador. Aquello causábc;les asombro, sobre todo la figuro del Capuchino. · Los misionero.s temieron por el éxito de sus trabajos, porque mmpió a llover con violencia y los caminos eran abismos de barro. No obstante, afluían los campesinos a millares, desde muy largas distancias y .de varias aldeas, lo que causaba verdadera admiración. Un día eran tan generales y fuertes los llantos, que hubo de suspender el sermón y rogar al público que se se– renase. El día que comenzaron las confesiones, fué tal la. afluen– cia·de gente llegada desde muchas leguas de distancia, que tenían que emplear doce y catorce horas diarias en· oír a los pobres pecadores y absolverlos. ' Tuvieron que organizar varias Comuniones generales, que se verificaron los días 13, 17 y 20. El P. Esteban, al describir los frutos espirituales; los atribuye no a su labor y pericia apostólica, sino a la gra– cia divina, exclama ndo con visible júbilo: «En esta Misión se ha visto más que en las precedentes la fuerza de la gracia divina; desde el principio conocimos que iba Dios a bendecir nuestros trabajos... » (lbid. p. 5.) Tenía nuestro Misionero el propósito de celebrar otra Comunión general el día de Santiago y dar la bendición papal. Pero ocurrió lo que era de esperar. Porque D. Pala~ dio Curríus cayó gravemente enfermo y el P. Esteban se sintió atacado de la fiebre. Ambos juzgaron necesario re– tirarse a Santiago, a donde llegaron el día 4 de agosto. He aquí dos sucesos admira bles. Ocurrieron en Mo– rón, luego de partir ambos misioneros para Guaninicum. A pesar del celo desplegado por éstos, y del buen ejemplo que dieron tantos centenares .de pecadores arrepentidos, h~o dos hombres que se resistieron a abandonar su mala VJ.da y empeñáronse en continuar un\dos ilegítimamente con sus mujeres. Así tenían libertad pma vivir con otras y "