BCCAP000000000000130ELEC

118 El Padre Esteban de Adoain bierno de· Guatemala, se disponían a trasladarse a Centro América. No olvidaba el P~ Prefecto en su informe el asunto· de la carta de naturaleza, que dilucidó claramente. Y aña– día que, según los tratados recientes entre España y Ve– nezuela, cualquier español tenía derecho a residir . en Ve– nezuela sin necesidad de tomar carta de naturaleza, como cualquier venezolano tenía derecho a vivir en España. El Arzobispo remitió este informe al Gobierno el día S. de may9. El Gobierno replicó con fecha 9 de mayo con un largo oficio, en que pretendía justificarse de las injusticias come– tidas contra los misioneros, y sobre ello, vertió conceptos injuriosos diciendo: «La tolerancia de parte del· Poder Eje– cutivo hoy con los Capuchinos y más después. con otra clase de personas improductivas como ellos, . pudiera com– prometer a la larga la moral y la seguridad públicas, y es ·un deber del Gobierno el evitarlo y el velar para que, a título de sacerdotes o de extranjeros pertenecientes a otra nación que tenga tratados con la República, no quede· burlada la ley de 10 de abril de 1845 sobre vagos» (]). ¡Hasta dónde llegó la incomprensión del Gobierno de Venezuela! ¡Eran vagos unos hombres que habían perdido la salud trabajando en el país sin recibir un .céntimo! ¡Eran vagos los que estaban moralizando Venezuela, cuya ci– vilización había retrocedido siglos! ¡Comprometían la moral de la Nación los que no cesaban de sacar almas de la cié– naga del vicio! ¡San Juán Bautista comprometía la moral del pala-::io de Herodes! ¡Herodes velaba por la moral! Ya se veía el deseo del Gobierno de expulsar a los. Capuchinos, aunque esforzábase en realizarlo en forma tal. que no diese lugar a una 'reclamación diplomática. El Gobierno procedía torpemente y la reclamación di– plomática no se hizo esperar: El lixcmo. Sr. D. Juan Gregario Muñoz y Funes, Cónsul General de Su Majestad Católica de España cerca de la República de Venezuela, elevó por oficio de fecha 8 de mayo, una seria reclamación al Ministro de Relaciones Ex– teriores, en la que expresaba que «no ha podido menos de leer con sorpresa una resolución que es una infracción . (1) Copia auténtica. Archivo del ,Vice-Postulador, Ca~peta 1,. n. 25.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz