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100 ANUARIO MISIONAL apropósito para vivienda de animales que para morada de hombres. La iglesia mide 50 metros de larga por 16 de ancha, es muy her· mosa y de cemento armado y en su construcción ha trabajado muy meritoria y abnegadamente el P. Benjamín de llarduya. El cernen· terio, cuya propiedad disputaba el municipio a la Parroquia, fué también asegurado por nuestros Padres a favor de é~ta. En Salase han reconstruido la anti¡?Ua iglesia arruinada y han techado y acondicionado el convento mal parado por el abandono y los baguios. Tsmbien han adquirido un gran terreno parra ce· menterio parroquial. En Sual se ha obtenido de regalo un terreno para capilla y otro para cementerio en el barrio apartado de Paitsn y se han he· cho tales arreglos y mejoras en la iglesia y en lo que servía de convento parroquial que ambos edificios esrán hoy completamente desconocidos. En Aguilar y Labrador las obras no han sido tan notables, pero han sido tantas en arreglos del suelo de la iglesia , del reboque de las paredes, de extinción de goteras, etc. etc. que han consumido también sumas considerables. 12-Conclusión Como corolario de esta breve exposición sobre nuestra Misión de Pangi.sinán, creo que tenemos derecho a deducir una gran dosis de optimismo para el futuro. A nosotros toca echar al surco Is se· milla y a Dios darle el incremento. Nuestros Padres, como acaba– mos de ver, no se dan descanso en sembrar por todos los medios en niños y grandes la palabra del Evangelio. La docilidad, la ale· grla y la sencillez con que todos Is acogen, nos hace creer que no cae en t ierra pedregosa ni fuera del surco en el camino, por lo que es de esperar que con la gracia de Dios dará a su tiempo el ciento por uno. No otra cosa es lo que nuestra Provincia ansia, al enviar de· sinteresadamante sus hijos a tierras tan lejanas y exigirles el má· ximo rendimiento para la gloria de Dios y difusión de la Iglesia. P. C. de Legaría Jlllslott•ro Capuchlno